Libros que he publicado

-2028. ¿Cómo será la Tercera República? -LA ESCUELA INSUSTANCIAL. Sobre la urgente necesidad de derogar la LOMLOE. -EL CAZADOR EMBOSCADO. Novela. ¿Es posible reinsertar a un violador asesino? -EL VIENTO DEL OLVIDO. Una historia real sobre dos asesinados en la retaguardia republicana. -JUNTA FINAL. Un relato breve que disecciona el mercadeo de las juntas de evaluación (ACCESO GRATUITO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA). -CRÓNICAS DE LAS TINIEBLAS. Tres novelas breves de terror. -LO QUE ESTAMOS CONSTRUYENDO. Conflictividad, vaciado de contenidos y otros males de la enseñanza actual. -EL MOLINO DE LA BARBOLLA. Novela juvenil. Una historia de terror en un marco rural. -LA REPÚBLICA MEJOR. Para que no olvidemos a los cientos de jóvenes a los que destrozó la mili. -EL ÁNGULO OSCURO. Novela juvenil. Dos chicos investigan la muerte de una compañera de instituto. PULSANDO LAS CUBIERTAS (en la columna de la derecha), se accede a información más amplia. Si os interesan, mandadme un correo a esta dirección:
repmejor@gmail.com

Tenéis información de los precios aquí:

domingo, 14 de diciembre de 2025

Relectura de "Tiempo de silencio"

     Empieza fuerte Tiempo de silencio. Recuerdo que la primera vez que la leí -con dieciocho años y en segundo curso de Filología-, ya desde el comienzo ni me enteraba de por dónde me venían, con ese bombardeo de cosas inconexas y diversas cuyo único denominador común es el foco del narrador-protagonista, que a la vez relata hechos en primera o  tercera persona (Sonaba el teléfono y he oído el timbre.), introduce los diálogos usando comillas en lugar de guiones, pero unas veces con verba dicendi (He dicho: "Amador") y otras sin ellos ("¿Por qué se ríe, Amador? ¿De qué se ríe usted?"), o sirviéndose, como hace a continuación, del estilo indirecto libre (Sí, ya sé, ya, Se acabaron los ratones.). También aparece por ahí algo que no sé si será monólogo interior o hablar consigo mismo, como cuando, después de un nuevo vistazo por el microscopio, el personaje constata para sus adentros: "Claro, cancerosa". Y no falta la revelación de las reflexiones que lo que ocurre le suscita, el fluir de la conciencia, como en ese irónico ¿Quién podrá nunca aspirar otra vez al galardón nórdico, a la sonrisa del rey alto, a la dignificación, al buen pasar del sabio que en la península seca, espera que fructifiquen los cerebros y los ríos?, producto de la penuria que al protagonista, un joven investigador médico, le acarrea su lastimosa carencia de medios. Para los que hayáis leído la novela, excuso decir que todo este arsenal lo he sacado de la primera página, y ya antes de voltearla, en aquella primavera de 1976 en que calculo que lo hice cuando era un estudiante, sospeché que me estaba enfrentando a un buen reto.

    Y acerté: Tiempo de silencio, con sus doscientas cuarenta páginas amazacotadas (hablo de la 10ª edición, publicada por Seix Barral en 1974) y su elaboradísimo estilo, es una novela difícil y que exige mucha concentración al lector, pero es necesario recalcar que también tuvo que representar un reto para el escritor, un reto sin duda colosal, por su compleja estructura, la variedad de sus registros estilísticos y léxicos, su rico vocabulario y la a menudo intrincada sintaxis. Luis Martín Santos debió de ser un hombre de gran talento. Nació en 1924, y con veintitrés años era doctor en Medicina, con veintisiete dirigía el Sanatorio Psiquiátrico de San Sebastián y con treinta y ocho, en 1962, publicaba Tiempo de silencio: no es fácil conseguir tanto en tan poco tiempo, así que, aparte de la tragedia personal, su muerte en accidente de tráfico en 1964 representó una gran pérdida para la literatura española. Hay que reparar además en las fechas y las intenciones artísticas. Cuando se publicó, esta novela tuvo algo de revolucionaria para la narrativa española, porque era muy diferente a lo visto hasta entonces y sus procedimientos abrían caminos en gran parte nuevos y desconocidos. Esto fue otro reto vencido por su autor, que sin duda era muy consciente de la necesidad de renovación en nuestro lenguaje literario de entonces y lanzó su propia propuesta: Tiempo de silencio, pero esto no le salió de chiripa, sino que lo hizo de forma plenamente consciente, ahí está esa frase, ese mil veces citado "Hay que leer el Ulysses". No obstante, agarrémonos a la frasecita con precaución, porque está pueste en boca de Pedro, el protagonista, en una situación en la que por esa boca ya ha circulado bastante ginebra y él se permite unos "jueguecillos estéticos" para hacerse el enterado ante una jovencita guapa, interesada por la literatura y que ha leído a Proust. Hay ahí mucha ironía -uno de los recursos más presentes en la novela-, la suficiente como para que resulte temerario eso tan repetido de que Tiempo de silencio va tras las huellas de Ulises.   

    Porque, además, es verdad que la abundancia de referentes culturales o el construir la novela en torno a una especie de paseo por su microcosmos próximo está en ambas obras, pero eso, para empezar, no es privativo de ellas y, por otra parte, la intención de ambos paseos es muy distinta, por no hablar de otra semejanza: las referencias clásicas, las que más directamente enlazan con el mito homérico, que para Joyce son fundamentales, mientras que Martín Santos las coloca sobre todo en boca de Matías (amigo de Pedro), un buen muchacho y de una cultura -clásica en especial- admirable, pero también un redomado botarate, lo que interpreto como una punzante ironía de Martín Santos hacia el irlandés. Por dejar atrás esta cuestión, otra de las grandes diferencias entre ambas obras es que Ulises no saben muy bien lo que quiere decir ni lo que cuenta ni sus propios admiradores (lo que, a mi juicio, es su mayor defecto, si bien he de reconocer que para muchos es parte de lo que la convierte en una cumbre de la litertura universal), mientras que Tiempo de silencio puede interpretarse muy bien, lo que no significa ni de lejos que sea una obra simple, monolítica o unívoca, como facilmente puede desprenderse de todo lo que he dicho hasta aquí: muy al contrario, es bastante compleja.

    ¿Y qué nos cuenta Tiempo de silencio? El viaje homérico de Pedro, su protagonista, empieza por culpa de esas carencias de las que hablaba al principio: se ha quedado sin ratoncitos para sus investigaciones y no tiene presupuesto para más, pero ahí surge Amador, un subalterno apicarado de la institución en la que trabaja que le dice que un tal Muecas (uno que trabajó eventualmente en ese sitio) los cría Dios sabe cómo en su chabola (la acción transcurre en 1949). Joven e ingenuo como es, Pedro tiene la ocurrencia de irse a ver al Muecas para comprarle ratones, lo que constituye un error mucho más grande de lo que estáis imaginando quienes no hayáis leído la novela. Sobre el mundo cimentado en está columna vertebral, se van engarzando otros de los ambientes en los que Pedro se mueve, y con esta agregación construye Martín Santos el mosaico con que nos presenta la variopinta vida del Madrid de la época, con rincones resplandecientes y tenebrosos, tristes y alegres, sórdidos y dignos, pero con demasiada miseria y mediocridad envolviéndolo todo. Podríamos pensar que el título apunta hacia esto, y no estaríamos del todo equivocados, pero, para orientarnos mejor, finalizaré con una cita sacada de las páginas finales:

    La bomba no mata con el ruido sino con la radiación alfa que es (en sí) silenciosa, o con los rayos de deutones, o con los rayos gamma o con los rayos cósmicos, todos los cuales son más silenciosos que un garrotazo. También castran como los rayos X, pero yo, ya, total, para qué. Es un tiempo de silencio. La mejor máquina eficaz es la que no hace ruido. Va traqueteando y no es un avión supersónico, de los que van por la estratosfera, en los que se hace un castillo de naipes sin vibraciones a veinte mil metros de altura. Por aquí abajo nos arrastramos y nos vamos yendo hacia el sitio donde tenemos que ponernos silenciosamente a esperar silenciosamente que los años vayan pasando y que silenciosamente nos vayamos hacia donde se van todas las florecillas del mundo.

     

    

viernes, 28 de noviembre de 2025

Para cuando caiga la fruta podrida

     Sin temor a que me llamen ingenuo u optimista, declararé que estoy convencido de que Pedro Sánchez no va a tardar en caer; es más, incluso en el grotesco y deplorable marco político que hemos alcanzado en España, teniendo en cuenta todo lo que ya llevamos encima y que a ello se añadió ayer el ingreso de Ábalos y Koldo en prisión, con lo que ya han pasado por ella tres de los cuatro viajeros del Peugeot de las chistorras, sería lo más pertinente que ese que falta, el más guapo, más listo y más enaltecido de todos ellos, anunciase su renuncia a la presidencia del Gobierno antes del domingo, o, todo lo más y estirando mucho el chicle, antes de Navidad.

    Es poco probable que tenga ese rapto de sensatez, pero, aunque no lo tenga, ya está frito, su tiempo ha terminado, y solo podrá alargarlo de forma artificial, forzada y uncida el penoso añadido de enrarecer aún más la ya irrespirable atmósfera política que padecemos, con las tremendas consecuencias que ello acarrearía. Sea como sea, parece claro que se avecina un tiempo nuevo, y ya no podemos permitirnos más fallos ni más tiempos catastróficos como los de Zapatero y el propio Sánchez o estériles como el de Rajoy, porque urge sacar a España del pozo bananero en que se ha ido convirtiendo tras años y años de incuria. Hay un buen montón de cosas que deben arreglarse inexcusablemente y, cuando caiga esa fruta podrida llamada Pedro Sánchez, sea quien sea su sucesor, no será creíble si no se pone con decisión y sin ambigüedades a la tarea de atajar esos males. Son tantos que serían difíciles de enumerar (hoy mismo, Carlos Martínez Gorriarán ha hecho un interesante listado, que no los recoge todos, a pesar de ser bastante exhaustivo), así que me limitaré a deja aquí un bosquejo general de lo que yo veo.

    -Abrir horizontes que ilusionen. Eso que nos abrió a quienes éramos jóvenes en 1978 el marco constitucional que hoy se quiere cargar la peor conjura golpista a la que ha hecho frente, esa que conocemos como Frankenstein y que comanda Pedro Sánchez. Ciertamente, aquellos tiempos fueron difíciles (había un paro considerable), pero también aparecieron amplias vetas de oportunidad, basta con ver algo innegable: en esa fecha comenzó la época de mayor avance económico y más profundas y extensivas mejoras en las infraestructuras, servicios y calidad de vida de nuestra historia. Si se compara con lo que afrontan los jóvenes de hoy, con amenazas tan tremendas como el parón de la natalidad, la implacable losa de la vivienda (que me temo que podría estallar en una sonora burbuja), la precariedad laboral o los bajos salarios, aquello fue una plácida mañana primaveral frente a un horizonte de nubarrones borrascosos.

    -Frenar la amenaza separatista. Tienen que acabarse los delirios rupturistas que abrigan los peores sectores de la política española, es decir, los que de manera eufemística se autodenominan nacionalistas, que son responsables de cosas tan graves como el terrorismo asesino de ETA (pero también de Terra Lliure), el abusivo disparate que se conoció como Plan Ibarreche, el laaaaargo golpe secesionista que empezó Artur Mas, culminó Puigdemont y ha resucitado Pedro Sánchez (algo tendrán que pagar por esto, digo yo), la permanente extorsión esgrimiendo falsos derechos para obtener sonrojantes privilegios, el ultraje constante a todo aquello que asocien con España, los abusos indecentes en materia lingüística y educativa, la corrupción envuelta en banderas regionales usadas como sacrosanto blindaje, el segregacionismo... Hay que replantear el Estado de las autonomías para acabar con esta aberración, que se manifiesta en producciones inconcebibles que asombran a los foráneos, como eso de que en un país haya regiones donde la lengua oficial nacional se proscribe en la educación. Hay que podar muchas e importantísimas competencias autonómicas que se han pervertido. O se doblega al separatismo o el separatismo despedazará España, han dado mil muestras de que van muy en serio. Y no perdamos de vista a esas formaciones izquierdistas enemigas de la democracia que se alían con el separatismo porque comparten sus fines destructivos.

    -Erradicar la legislación y las políticas favorables a la delincuencia. Que el Tribunal Constitucional emitiese una sentencia exculpatoria para los responsables de los ERE de Andalucía, un descomunal caso de corrupción generalizada que no se sabe los cientos de millones de euros (más de seiscientos seguro) que volatilizó, indica el nivel de perversión a que hemos llegado en España, donde Sánchez ha indultado a golpistas o a autores de ataques violentos, los ha amnistiado o ha suavizado las penas contra delitos que habían cometido. No es posible que un país prospere sobre estas bases; no es posible ni tolerable la impunidad grosera de que gozan en España los okupas, que ha hecho un daño terrible a miles de personas; no es posible que lleguen unas tías fanáticas de no sé qué y hagan una ley que suaviza las penas contras los violadores y ha puesto en la calle o acortado las condenas de centenares de ellos. Un país gobernado por la locura que favorece a los delincuentes va derecho a la destrucción. Meto aquí las deplorables políticas que con el sanchismo, pero también desde antes, hemos padecido en materia de inmigración. El balance porcentual de delitos cometidos por extranjeros y por nacionales es escandalosamente favorable a los foráneos, con el agravante de que lo es más en los delitos más duros, tales como asesinatos, violaciones o formación de bandas violentas, de manera que no puede negarse la perjudicial influencia de la inmigración en la delincuencia, ya lo de los menas es sencillamente una burla. Esta vez no voy a poner enlaces, pero quienes de verdad quieran encontrar estadísticas que lo demuestren las encontrarán fácilmente, y además, las más fiables, es decir, las oficiales, tales como las de Interior o los cuerpos policiales, serán las más contundentes. Aconsejo que, si alguien se decide a mirar las de medios de comunicación, tenga cuidado, porque los hay muy amigos de dar gato por liebre; particularmente La Sexta hace unas manipulaciones sonrojantes.

    -Derogar la LOMLOE y consensuar, de una vez, un sistema educativo razonable. Con buena voluntad esto sería posible, pero, desgraciadamente, las malas voluntades están muy arraigadas en el universo educativo, sobre todo en sectores como estos: los sindicatos pesebristas, las pedagogos, el pedagogismo, la izquierda educativa, las patronales de la privada, la caverna separatista... Aun así, es inexcusable la elaboración de una ley educativa que garantice, sin trampas ni sectarismos, algo tan sano, razonable, necesario y benéfico como educar a nuestros niños y jóvenes. Esto, hablando solo desde la perspectiva meramente didáctica, pero sucede que en la actualidad nuestra educación sufre además el azote de tenebrosos intereses políticos que inoculan en ella una carga de adoctrinamientos tan elevada como intolerable. Por una parte está el separatismo, que envenena al alumnado, a su libertad y a la pura transmisión del conocimiento con sus persecuciones lingüísticas y sus tergiversaciones sectarias, lo que requiere que se haga lo posible y lo imposible por arrebatar de sus negras zarpas no ya las competencias, sino la más mínima capacidad de decisión en materia educativa. Por otra parte, está la funesta LOMLOE (1), que es una tremenda maquinaria de adoctrinar en la agenda del wokismo y de penetrar en el sagrado territorio de la emocionalidad de los alumnos, para narcotizarlos y adueñarse más fácilmente de su libertad, lo cual, por si fuera poco, se acompaña de una letal erradicación de la exigencia. Es inexcusable suprimir esta ley, una de las más nocivas que ha producido el sanchismo.

    Ya he dicho que esto era solo un bosquejo de las cosas que debería hacer cualquier gobierno que suceda al sanchismo y pretenda resultar creíble en la necesaria voluntad de corregir o erradicar los males que ha sembrado, que son, por supuesto, muchos más que los que aquí se mencionan o aluden, con lo cual se hace patente que, si al final tenemos la bendita fortuna de que el oso cae, nos quedará una ingente tarea por afrontar.

     

1.- Os dejo aquí, para sustentar lo que digo, solo una muestra de lo mucho que he escrito contra esta abominación: Trece observaciones; Aprobar suspendiendo; Derogar la LOMLOE.   

miércoles, 19 de noviembre de 2025

Las ganas de ofender de un gobierno de inútiles

     Qué pena dan los años que hemos vivido en España desde 2018, estos años en que hemos sido gobernados por un canalla sin principios incapaz de la menor muestra de cosideración o respeto hacia nada ni nadie. Rodeado de unos socios políticos vomitivos y una red de esbirros serviles y/o corruptos (y a la espera del día en que se proclame que él es un corrupto más, día que sospecho que no tardará en llegar), ese canalla se ha dedicado a procurar su medro, socavar la democracia, erosionar la nación y mentir, mentir, mentir de manera enfermiza. 

    Otro de los vicios enfermizos del canalla es hostigar a los que señala como sus enemigos, con especial predilección por humillarlos gratuitamente, por escupirles a la cara sin venir a cuento. No se me ocurre otra explicación que esta para la última coz que nos ha asestado, este desafortunado cartelón que ha colgado en la Gran Vía madrileña:



    Hace falta tener muy mala baba y muchas ganas de asestar golpes bajos para descolgarse con un desplante como este. Y ser muy irresponsable. Como se nos explica en los medios (pulse aquí o aquí), la frase quiere enunciar uno de los logros que, a juicio de nuestro menguado Gobierno actual, alcanzamos con el advenimiento, hace unas décadas, de la democracia: la suprema libertad de colgar cartelones en catalán en medio de la madrileña Gran Vía. ¿De verdad que la democracia para lo que sirve es para eso? ¿No tendrá otros fines más dignos, inteligentes y sustanciosos? ¿Cuántos de los españoles que allá por los años setenta miraban con ilusión hacia la democracia albergaban el anhelo de que, con su advenimiento, ¡por fin!, podrían colgarse cartelones en catalán en la Gran Vía? Se contaban por millones, que nadie lo dude, ¡era una necesidad perentoria! 

    ¿A quién se le podría ocurrir semejante majadería? ¿Y para qué? Hemos tenido que llegar a 2025, cincuenta años después de la muerte de Franco y a pocos días de que la Constitución cumpla cuarenta y siete, para conocer las respuestas: a un Gobierno de mentecatos ineptos y con la inicua finalidad de lamerle el trasero al separatismo y humillar un poquito a la nación española, porque la pregunta es esta: en un tiempo en que se nos ha impuesto el bochornoso uso de lenguas de alcance SOLO LOCAL en el Congreso y el Senado, en que en Cataluña se multa por rotular los establecimientos en español, se agrede en las universidades a los estudiantes, profesores o visitantes que no renuncian a su derecho a expresarse en esta lengua (la oficial de la nación y hablada por todos, lo recalco para los muchos extranjeros que me leéis), se la hostiga en la escuela, se pisotea el derecho de niños, adolescentes y adultos a educarse en ella, se queman la bandera de España y la Constitución hasta en la televisión autonómica, se persigue el uso del español en la sanidad,  se incumplen sentencias que obligan a dar en la escuela catalana un miserable 25% de clases en español o Salvador Illa ha firmado con ERC un acuerdo de imposición brutal del catalán y lo está aplicando de forma inmisericorde, ¿se puede asociar la democracia con el uso del catalán (1)?

    Solo lo haría alguien infinitamente malvado y/o infinitamente estúpido, méritos ambos que acredita nuestro actual Gobierno. Solo lo haría una camarilla de incendiarios con irresponsabilidad de adolescentes.

    A menudo reflexiono sobre lo que nos han traído los años del sanchismo. Cualquiera que lo haga, cualquiera que mire con frialdad el abismo de corrupción, conflicto, crispación, disparates, mentira, ataques a la democracia y a la nación, desgobierno y porvenir inquietante para la juventud, ¡excavado por el propio Gobierno!, que han representado, no podrá por menos que considerarlos los más oscuros de la democracia, un periodo de negra degradación. Vuelvo a aquellos millones de españoles que allá por los años setenta mirábamos hacia la democracia con ilusión: ni imaginábamos que era esto a lo que vendríamos a parar ni, por supuesto, lo hubiéramos querido. Tampoco ahora debemos conformarnos.

1.- O del vasco o el gallego: sabemos muy bien que TODAS las comunidades en las que los separatistas han podido hincar su pezuña padecen una severa persecución del español, la lengua oficial de España, una situación kafkiana que solo se explica por la ya vieja corrupción de nuestra casta política.

jueves, 6 de noviembre de 2025

Los dos mil días de Nadia Calviño

     Hoy me encuentro con la noticia de que Nadia Calviño, la que fue vicepresidenta y ministra con Sánchez entre junio de 2018 y diciembre de 2023, ha escrito un libro titulado Dos mil días en el Gobierno. Por lo que he podido ver, parece ser un escrito de autobombo y autojustificación, ya que, si por un lado la señora Calviño se muestra muy satisfecha recalcando que siempre se sintió muy apoyada por el presidente, por otro nos relata los épicos desvelos que padeció por sus diferencias con Yolanda Díaz, con Pablo Iglesias o en un momento en que Sánchez pactó no sé qué con Bildu, allá por 2020. 

    La imagen que yo conservo de la gestión de la señora Calviño no justificaría su autosatisfacción. Uncidas a los vaivenes y las mentiras del Gobierno al que perteneció durante esos dos mil días, sus políticas no fueron mejores que las del conjuto, como no podía ser de otro modo, y no debemos olvidar que una de las primeras medidas que tomó, cuando vio que las cifras sobre el PIB no le eran muy favorables, fue cambiar el modo de calcularlas que se había utilizado siempre por otro que le resultaba más benigno: ¿se diferencia esto en algo de las trampitas que hace su feroz enemiga Yolanda Díaz con el cómputo de los fijos discontinuos para maquillar falsear las estadísticas sobre el paro? NO. Por otra parte, si no recuerdo mal, la señora Calviño intentó trabajarse un empleíllo fantasma para su marido, una cosilla de 80.000 euracos al mes, plenamente prescindible, creo que en Patrimonio Nacional. ¿Y recordáis sus risitas cómplices con Sánchez en el Congreso? ¿O aquellos numeritos de salirse de las fotos en las que ella era la única mujer? Y al final, esa fuga dorada hacia el BEI, con un sueldazo de casi 400.000 euros, un gran logro, sobre todo para ella, pero tal vez al precio de que España perdiera el convertirse en sede de la Agencia Europea del Medicamento, algo que hubiera sido más positivo para todo el país. ¿Y aquella frase de Sánchez: “Ellos no tienen a nadie, nosotros tenemos a Nadia”? 

    No parece que le fuera tan mal, se la veía muy contenta, y ella es la primera en reconocerlo y enorgullecerse, así que ¿a qué vienen los lloriqueos a cuenta de los horrores que padeció con la Yoli, con Iglesias o con los pactos de Sánchez con Bildu? Suenan a excusa, a querer nadar y guardar la ropa (¿se ve venir doña Nadia la caída de Sánchez?), y eso está muy feo. Si tan malos eran, ¿por qué compartió con ellos DOS MIL DÍAS

    Juzgo por completo innecesario leer este libro, pues no estoy para autobombos/autoexcusas de nadie ni de Nadia, y ya el título lo dice todo: dos mil días colaborando con el gobernante más nefasto de la democracia española, no es precisamente para tirar cohetes.


viernes, 31 de octubre de 2025

Vito Quiles manda al hospital a un periodista de "El Español"

     Ayer por la tarde tuvo lugar un lamentable suceso en la Universidad de Navarra. Un grupo de en torno a doscientos cavernícolas partidarios de la independencia del País Vasco se manifestó violentamente y, en el transcurso de su explosión destructiva, agredieron de forma brutal al periodista de "El Español" José Ismael Martínez. En una noticia de algo más de un minuto y medio de Telemadrid, se pueden apreciar muy bien los extremos más significativos del hecho: la violencia del despliegue, su perfecta organización en filas apretadas, el tufillo a escuadrón de la muerte que emanaban esas bestias uniformadas de negro y encapuchadas y, por supuesto, el salvaje corneamiento en manada que le infligieron a José Ismael Martínez. Algunos dirán que si nazis, que si fascistas..., pero no es eso, no se dejen liar: la filiación de estos criminales tiene sello propio y euzkoetiqueta: es aberchale, etarra, como delata el inconfundible estilo jarraichu que los más viejos reconocemos nada más ver su cobarde ataque. 

    Al parecer, estos salvadores de la patria vasca, se dirigían a reventar un acto (y no queda duda de que algo más que el acto) convocado por el periodista Vito Quiles. ¿Fueron los proetarras quienes machacaron al señor Martínez o fue Vito Quiles? Veo cómo cuenta hoy "El País" las consecuencias del ataque y no me queda claro. Empecemos con el titular:

    El ultraderechista Vito Quiles suspende una semana su gira 

por las universidades tras los disturbios en Pamplona

    Aparece ahí la primera atenuante que el diario pedrista brinda a los heroicos gudaris: ¡Vito Quiles es un ultraderechista!, así que la bestial acción defensiva... alguna justificación tendría (tampoco van a decir que la justificación fuera plena, ya conocemos el estilo tartufo de "El País"). Para que no olvidemos la filiación de Quiles (que restringiría su derecho a que los cipayos aberchales no le dieran de hostias), más abajo se dice: El agitador había anunciado su presencia en la Universidad de Navarra. Queda claro, ¿no? Si eres un agitador que viene a provocar, no te extrañes de que unos sanos zagalotes te reciban a puñetazos, patadas y pedradas.

    Os conozco ya desde hace muchos años y sé lo que ahora muchos estáis pensando: "Vale, muy bien, pero ¿por qué dices en el titular eso de que fue Vito Quiles quien mandó al hospital al periodista de "El Español?". Es que no lo digo yo, lo dice "El País" en el segundo párrafo de la noticia, mirad:

    El ultraderechista Vito Quiles ha anunciado este viernes en su cuenta de X que suspende durante una semana el tour que venía realizando por diferentes universidades del país tras los disturbios que provocó en el campus de la universidad de Navarra, en la que fueron detenidas dos personas.

    ¿Es así o no es así? ¿De quién fue la culpa de lo ocurrido y de la agresión a José Ismael Martínez? Seréis capaces de decirme que fue de esos pobres doscientos muchachos que pasaban por ahí todos vestidos de negro y con capucha, ¿verdad? ¡Pues no, señor! ¡Fue de Vito Quiles, que provocó los disturbios! En fin, volveré ya al registro serio, porque todo esto es muy serio: es muy serio lo que hicieron ayer esos salvajes en Pamplona, es muy serio que "El País" los disculpe y retuerza las cosas de manera que sea Quiles el que quede como culpable, es muy serio el vomitivo imperio de la mentira que el sanchismo y sus esbirros, entre los que "El País" ocupa un lugar destacado, han impuesto en España.

    Porque aún va más lejos: es que, a su parecer, esos pobres chicos fueron víctimas de la provocación y lo suyo fue solo una reacción defensiva. Ni siquiera está claro lo del Martínez ese, mirad lo que dicen las últimas líneas del artículo, mirad:

    Grupos próximos a la izquierda abertzale provocaron a su vez una protesta frente al acto de Quiles en el que dos personas fueron detenidas. Según publicó El Español, el periodista de este medio José Ismael Martínez fue agredido "brutalmente" por encapuchados mientras informaba de los altercados

    Pensad por un momento en esas personas que solo leen o ven "El País" y la prensa del Movimiento y que no hayan visto imágenes como las de Telemadrid que os he enlazado más arriba o la cara que le quedó a José Ismael Martínez: para ellos, eso serán bulos, exageraciones de "El Español", que seguro que también está en el catálogo de ultraderechistas del sanchismo. ¡Y ese "brutalmente" entre comillas, ¿qué me decís?! Demoledor. Y que no se os pase eso de frente al acto de Quiles en el que dos personas fueron detenidas. Otra ambigüedad ladina, otra trampa, porque, redactado así, parece que las detenciones se produjeron en el acto de Quiles, que ni siquiera se celebró. Ahí se quiso sembrar esta confusión: la de que la violencia fue compartida, porque la hubo tanto por el lado de los de Quiles como por el de sus amables visitantes, cosa que es falsa. "El País" usa la mentira y la manipulación del lenguaje como un arma de destrucción masiva, "El País" repugna. 

    Y repugna también -y asusta mucho- lo que está sucediendo donde quiera que florezca el separatismo. La violencia es cada vez mayor; la impulsan sus incalificables líderes y la aplaude o la justifica todo el universo sanchista. Tengamos mucho cuidado con esto, porque es ya de por sí muy malo y presagia un futuro mucho peor, si no lo cortamos. En concreto en Navarra, la cosa no debería dejarnos indiferentes para nada, recordemos lo de Alsasua (Alsasua 1, Alsasua 2). El aumento sensible de la violencia de todo tipo y la intensificación de las pretensiones separatistas son dos de los peores males que nos ha traído el sanchismo. Erradicarlos no será fácil y presumo que en esa batalla no estará "El País", como no sea del lado de los que rompen la cara a los periodistas, cosa curiosísima en un periódico.

lunes, 20 de octubre de 2025

La selectividad de Madrid se columpia con el aranés

     Ha llegado a mis manos el modelo de examen de selectividad de Lengua Española (1) que los responsables de esta prueba en la Comunidad de Madrid han facilitado a los profesores de instituto en la reunión a la que se les convocó para orientarles sobre el desarrollo de la prueba. Hay en él una pregunta que se enuncia así:

    2.5. (0,8 puntos) Enumere las lenguas de España que tienen la consideración de oficiales.

    Más adelante, en el solucionario, se propone para ella la siguiente respuesta:

    2.5. (0,8 puntos) Por orden alfabético: aranés, castellano o español, catalán (también denominado valenciano en la Comunidad Valenciana), euskera o vasco, gallego.

    Dejaré aparte otras cuestiones menores y me iré directo al error flagrante que figura en esa respuesta: el aranés no debería estar ahí, porque no es una lengua, sino un dialecto que se habla en el Valle de Arán, comarca del Pirineo leridano que, según datos de 2024, cuenta con 10.545 habitantes, de los que... ¿cuántos hablarán solo en aranés? Siendo generosos, no creo que lleguen a los tres mil. Es una minúscula variedad local, extrema y muy aislada del gascón, dialecto o lengua (no acaba de haber acuerdo) en retroceso que es a su vez variedad del occitano, lengua o familia de lenguas (tampoco hay acuerdo en esto) que se extiende o extienden por el sur de Francia y también está o están en retroceso. Podría haberos ahorrado todo este galimatías recurriendo sin más al Diccionario de términos filológicos de Fernando Lázaro Carreter, que, en la página 55 de su tercera edición (1977), se pronuncia así: 

    Aranés: Dialecto hablado en el Valle de Arán, que constituye un enclave gascón en el dominio lingüístico catalán.

    Claro y preciso don Fernando, y esto no hay investigación de filólogos pagados por la Generalidad que lo tuerza, y aún es generoso con eso del "dominio lingüístico catalán", si atendemos a ciertos cuadritos de la propia Generalidad que aparecen en los enlaces sobre el Valle de Arán y el aranés que os he dejado más arriba, que reflejan que la lengua que más se habla en aquel territorio es el español. 

    A la vista de estos datos, nadie serio puede sostener que el aranés sea una lengua. ¿De dónde se sacan, pues, los responsables del modelo de examen de Lengua Española de la selectividad de Madrid esa respuesta incorrecta? Todos lo sabemos, por supuesto: de los delirios del nacionalismo catalán, que, con la varita mágica de su sectarismo, desvergüenza y falta de respeto a la verdad, ha elevado en sus leyes el aranés a lengua, aunque no lo sea, para, posteriormente, hacerlo cooficial en toda Cataluña y tratarlo mejor que al español, al que, como todo el mundo sabe, persigue con saña. Aquí está la explicación del misterio: el insignificante aranés ha sido instrumentalizado por el separatismo en su obsesivo empeño por humillar al español (2), a sus hablantes y a España.

    O sea, que el aranés es una lengua, sí, pero en el ámbito político de una región desquiciada y por atrabiliario decreto... vigente solo para esa región, y ni siquiera ahí dejará por ello de ser un dialecto, porque las leyes torcidas pueden mentir lo que quieran, pero no pueden cambiar la realidad: si mañana a la Generalidad de Cataluña, que es tan así con las leyes, le da por sacar un decreto que establezca que Jordi Pujol es un jovenzuelo y Salvador Illa un guaperas, no por eso dejarán de ser el primero un vejestorio y el segundo un adefesio. 

    Pero en los programas de Lengua Española de la Comunidad de Madrid, en lo referido al aranés, no nos guiamos -o no deberíamos- por los disparates legales que salgan del Parlamento catalán, sino por las enseñanzas de los filólogos, así que, en la respuesta del modelo para la PAU de 2026 para la pregunta 2.5, el aranés está de más, porque filológicamente es un dialecto. Los organizadores de la EvAu deberían corregir este error, porque esa solución incorrecta que ofrecen podría sembrar la confusión entre los profesores y los alumnos, y, sobre todo, porque las instituciones educativas deben emitir enseñanzas correctas y veraces, por solvencia, honestidad y aprecio a su prestigio. 

    Si este error ha sido un descuido motivado por la falta de atención, no tiene más recorrido: se subsana y listos, pero sería imperdonable que obedezca a la mala intención de alguien que haya pretendido legitimar las mentiras sectarias de determinadas bandas políticas mediante el ruin procedimiento de colar esas ruedas de molino en un ámbito tan delicado como lo que se debería responder en un examen de la PAU y, obligando a los alumnos a tragarlas respondiendo lo que no es por miedo al suspenso, convertirlas en resplandecientes verdades.

1.- Aquí tenéis acceso al documento: PAU de Madrid 2026. Si queréis más información, pulsad aquí.

2.- Os dejo aquí solo unos cuantos de los artículos en los que he tratado este gravísimo asunto:

-El catalán en el reciente acuerdo ERC - PSOE.

-La guerra de las lenguas y el motín de los dialectos.

-La apaleada lengua española.

-Desmantelar la tiranía de las lenguas cooficiales.

miércoles, 15 de octubre de 2025

Bernedo: cinco apuntes y una imagen aterradora

    Los escandalosos hechos que han tenido lugar en unas colonias veraniegas organizadas en la localidad alavesa de Bernedo por una entidad llamada Sarrea Euskal Udaleku Elkartea han producido un amplio y profundo rechazo en la sociedad. Como la información sobre ellos es ya abundante, me limitaré a exponer cinco breves apuntes sobre el asunto y cerraré el artículo con una imagen.
    1.- Aberraciones intolerables. No sé cómo deberíamos denominar en los tiempos que corren a la tortura a la que fueron sometidos los niños en el campamento, pero en el lenguaje que yo acostumbro a usar se llama perversión de menores. Fueron a pasárselo bien con lo típico: baños, amistad o actividades al aire libre y se encontraron bajo el yugo de una gavilla de malvados que los obligaron a cosas como estas: ducharse desnudos todos juntos, chicos y chicas; soportar la presencia de los monitores -adultos, por supuesto- desnudos entre ellos en esas mismas duchas; aguantar el exhibicionismo permanente de esos mismos monitores, que acostumbraban a pasearse por el campameno desnudos, o casi, luciendo impúdicos "modelitos"; indecente "decoración" en los servicios; acoso sexual; exigencias humillantes como la de chuparle el pie a un monitor para que diera la merienda: una demencial orgía de suciedad y sexualización.
    2.- Con la palabra "euskal" por delante. No hará falta decir que los más indignados y asombrados fueron los padres de los niños, ya fueran denunciantes o de los que se enteraron por la prensa. Se quejaban, naturalmente, del maltrato de que han sido víctimas sus hijos, pero también de otras cosas, como la negligencia de las autoridades que permitieron esta aberración o las explicaciones que se les han dado, insuficientes en el caso de las gubernativas o chulescas, ofensivas y desafiantes en el caso de las aportadas por los organizadores del campamento. En alguna de las noticias que he leído, uno de esos padres indignados expresó la razón exacta de esta pesadilla: el invento llevaba la palabra "euskal" por delante. En el paraíso vasco, eso te otorga la santificación y la licencia para todo.
    3.- El bendito PNV... y también el PSOE. Y como andaba el sacrosanto euskera de por medio, el gobierno navarro, presidido por la socialista María Chivite -esa señora tan amiga de Santos Cerdán-, también favoreció la iniciativa, con subvenciones y respaldo. Por su parte, el gobierno vasco, del PNV, el incompetente guardameta al que le han colado este imperdonable gol, está siendo objeto de duras críticas por su tolerancia, ya que estaba al tanto del asunto desde hacía años y no hizo nada. Su consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, recomienda ahora hablar con cuidado, ya que se trata de personas menores y sus derechos, y por lo tanto la legislación es mucho más rigurosa. Usar como escudo a las propias víctimas para imponer la ley del silencio y proteger a los facinerosos y a quienes fueron incapaces de frenarlos: solo el PNV puede alcanzar tales extremos de retorcimiento.
    4.- Mariconizar a vuestros niños. En medio de toda la historia, llegó al general conocimiento un artículo publicado en febrero de 2025 en el diario "Berria" por Aner Euzkitze (cuyo nombre real es Aner Peritz Manterola. Para saber más acerca de este pajarraco, pulse aquí), el cual se titulaba Niños y el esencialismo de género. Este personaje, que es uno de los responsables de Sarrea Euskal Udaleku Elkartea, con la fatuidad pringosa tras la que los ideólogos transexuales acostumbran a esconder su desolador vacío, despliega ahí sus disparates acerca de la identidad sexual y la educación. En el proceloso escrito (publicado originalmente en vasco, así que no sé si lo que os facilito está mal traducido o el que se expresa así de mal es este señor), se desliza esta enormidad:
    Queremos llevar a cabo la adoctrinación transmaribollo y estamos dispuestos a llevarla a cabo. No era broma, tenían razón los ecos, queremos mariconizar a vuestros niños (normalmente no tenemos niños nuestros) para que vosotros, como hicisteis con nosotros, no los heterosexualicéis. No lo consiguieron del todo. Y nosotros también tenemos títulos de profesores.
    Una auténtica bomba, una declaración de intenciones que hielan la sangre. Qué amenazas más tremendas, qué grosera arrogancia. Y qué mente más escabrosa; este señor, esta mala persona (¡pobre del niño al que le caiga como profesor!), debería buscarse un buen psiquiatra. Pero para lo que nos importa a los demás lo que de verdad destaca y alarma es ese objetivo de mariconizar a los niños por su santa voluntad, presentado como una conspiración a gran escala y valiéndose de los títulos de profesor, que, en unas manos como las suyas, se convierten en una poderosa arma de destrucción. Pone los pelos de punta y es una confirmación muy explícita de que los sectores más radicales del mundo LGTBI y transexual tienen una estrategia muy estudiada para colonizar la enseñanza y desplegar en ella su propaganda llena de falsedades, con el fin de empujar a los niños hacia sus opciones sexuales (1). 
    5.- Algunos padres aprueban el campamento y apoyan a sus monitores. Así lo hicieron un centenar de ellos a través de una carta publicada en Berria, el mismo medio en que se expresó Aner Euzkitze. Les agradecen el haber facilitado a sus hijos unos campamentos centrados en el euskera y el feminismo. Después de lo que ya se sabe, solo se me ocurre una explicación: hay gente para todo. 

    Pasemos, para finalizar, a la imagen aterradora, la cual, como supondréis ya los que estéis un poco al corriente de este asunto, no puede ser otra que esta, que he obtenido de "The Objective":


    ¿Es o no aterradora? ¿Es tranquilzador ese gnomo grotesco? ¿Despierta simpatía? ¿Es gracioso? Para nada, todo lo contrario, fijaos en el careto antipático del tipo, en su postura de tensa dominación sobre los niños. Y luego está el feísmo del disfraz, que pienso que no es para nada casual, sino que más bien está estudiado para infundir un poquito de miedo. Esta foto no chocaría como cartel de una película que se titulase Horror en el campamento, o algo por el estilo. Y luego está lo más repulsivo: la tremenda obscenidad. ¡Qué impresión más desagradable transmite ese individuo mazado de muslos rollizos con esa minifaldita ridícula a ras de colgajos! Da asco. 
    Así no se trata a los niños, ni en nombre del PNV, ni del euskera ni de monserga de género ninguna.

1.- Llevo mucho tiempo avisando contra esto y, una vez más y las que haga falta, os dejaré enlaces a algunos de los artículos en que lo he hecho: La escuela no está para enseñar teorías "queer"; Las tórridas lecturas del IES "Porreres"; Lenguaje inclusivo; El vídeo de Leo. Mi beligerancia está más que justificada: gracias a abominaciones legales como la ley trans o la LOMLOE -una ley más enfocada a adueñarse de la libertad de los alumnos que a educarlos-, la armada LGTBIQ+ ha irrumpido con prepotencia en los centros con la convicción de que son su cortijo y pueden entrar en él a arrastrar a los alumnos a sus opciones, o a mariconizarlos, si queremos usar los desacomplejados términos de Aner Euzkitze, afirmándose en las muletas legales que les conceden esos bodrios sanchistas. HAY QUE REBELARSE CONTRA ESTO; no podemos permitir que nadie juegue con la libertad de niños y adolescentes. Y que conste que el asedio es permanente. En alguno de esos artículos, hablo de unas aberrantes guías trans destinadas a llenar de confusión las cabezas de los niños; pues bien, aún hoy, y nada menos que en el propio País Vasco y con el respaldo de ese gobierno del PNV que está envuelto en el jaleo de Bernedo, se han publicado unas muy parecidas. Echadles un vistazo a los dibujitos de esta noticia y decidme luego si ya solo con eso no es para vomitar: la manipulación de las mentes infantiles que persiguen con esa edulcorada falsificación es intolerable (el 17 de octubre, dos días después de la publicación de este artículo, encuentro esta otra, que abunda, y de qué manera, en lo que digo: guías de manipulación transexual para colegios). Y, con ser mala la gran operación de engaño que amenaza a nuestros jóvenes, pensemos que es aún peor de lo que parece, porque no se queda ahí. ¿Quiénes son los agentes de esta ofensiva? El nacionalismo (PNV y esos campamentos euskaldunes); el wokismo (transexualidad) y el PSOE (Chivite y la LOMLOE). ¿Los habremos visto ya en alguna otra parte? ¡Acertasteis! Son las mismas corrientes políticas que componen el engendro Frankenstein.  Los jueguecitos estos de ingeniería social a los que la LOMLOE les pone la alfombra roja están inscritos en el plan de esta horda para cargarse la convivencia civilizada.
     

viernes, 3 de octubre de 2025

El Furor y la fiesta

 

 


 


    Para contextualizar lo que quiero decir en este artículo, me ha parecido que podría ser muy útil la comparación entre las dos imágenes paralelas con que lo encabezo. La pregunta que me formulo es la siguiente: ¿se puede tomar una gran tragedia como pretexto para una juerga? Por supuesto, yo creo rotundamente que no, pero parece que hay gente que no lo tiene tan claro, a juzgar por lo que desde el 31 de agosto, día de su partida, hemos visto de la llamada Global Sumud Flotilla, ese desparrame náutico al que Ada Colau se presentó sonriente y enmochilada, como si fuera de excursión al monte. Decían que iban a llevar ayuda humanitaria a Gaza, pero este dignísimo objetivo casa muy mal con la propia imagen dominguera de la exalcaldesa, la verbena exhibicionista que se montó en el puerto de Barcelona para la despedida, la organización chapucera del dudoso socorro humanitario y el permanente jolgorio del que ha sido celosa cronista la inefable Barbie Gaza, señalada integrante de la aventura.

    NO: eso no tiene nada de compromiso humanitario ni de acción solidaria, eso ha sido un vulgar cachondeo narcisista cuya principal finalidad era airear y promocionar la imagen de sus participantes, alimentar su ego. Por no servir, no ha servido ni para llamar la atención del mundo sobre la tragedia humanitaria que sufre Gaza, porque esta es ya bien conocida, no necesita tan abnegados propagandistas. Esto no ha sido para nada jugársela por Gaza, sino jugar con Gaza, lo cual, a mi juicio, constituye la mayor aberración de esta farsa, porque hace falta mucha vileza para montarse una falsa imagen de héroe a cuenta del sufrimiento y la muerte ajenos.

    Por si la juerga no hubiera estado lo suficientemente animada, a las pocas semanas de su inicio, el Gobierno español decidió agregarse y tuvo la humorada de enviar como representante un buque de guerra llamado Furor. El Furor y la fiesta, la verdad es que la cosa acabó quedando a medio camino entre Faulkner y Hemingway: la estupidez, la hipocresía y la frivolidad pasándoselo en grande en la kermés de la muerte y la ruina. ¿Con qué finalidad cometió Pedro Sánchez la monumental torpeza de involucrar a España y a sus fuerzas navales en un reto a otro Estado enviando un patrullero junto a una flotilla de perroflautas provocadores? Según él, con la de ofrecerles protección, aunque, según otras voces, fue para contentar a sus socios gubernamentales de Sumar, fervorosos defensores de la flotilla.

    En el momento en que escribo esto, se sabe ya que el estúpido disparate de la flotilla ha terminado como era de esperar: los israelíes la han interceptado muy lejos de Gaza, han desbaratado la aventura y han detenido a los intrépidos lobos de mar, que ahora están en trámites de ser devueltos cada mochuelo a su olivo. El cacareado propósito de llevar ayuda humanitaria se ha visto frustrado, cosa que seguro que no les importa mucho, porque insisto en mi convicción de que era un embuste, un mero pretexto, lo que quedaría confirmado si creemos al portavoz de la policía israelí, que está registrando los barcos, quien ironiza diciendo que no han encontrado mucha. Yo sí te creo, hermano. Soy de los que piensan que el montaje ha cosechado un espantoso ridículo, pero más por la grotesca imagen que han dado de sí mismos que por su fracaso, que ha sido relativo, pues algunos logros han alcanzado, ¿o me irán a decir que un mes de crucero de placer es poca cosa? ¡Lo que han bailado, lo que se han divertido! ¡Qué bello es vivir!, aunque... retorno a lo que dije arriba: ir en plan romería festiva a un lugar donde, desde los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023, han ocurrido cosas horrendas, es una vileza y una insensatez. También han tenido un relativo éxito propagandístico, porque a muchos sus andanzas nos parecerán repugnantes, pero, entre sus afines -que también son muchos-, se han ganado la admiración

    Este artículo quedaría cojo si no incluyera alguna reflexión sobre el papel del Furor, y a tal efecto no puede haber una voz más autorizada que la de Margarita Robles, nuestra ministra de Defensa, que hizo unas declaraciones acerca de la farsa de la flotilla que merecen ser tomadas en consideración. Repite al menos tres veces la señora Robles que llevar alimentos y medicinas es una labor admirable, pero, sin la menor duda, ella tenía que saber desde el principio que de eso no había nada, así que estas palabras son un cínico brindis al sol. También insiste en otras dos cosas: en que el Furor no iba a penetrar en la zona de exclusión y en apelar a la responsabilidad de los miembros de la flotilla, pues se exponen a crear peligro para ellos y para otros. Pero esto, sin la menor duda, también tenía que saberlo la señora Robles desde el 31 de agosto, y aun desde antes, por lo cual uno se pregunta por qué ni ella ni el Gobierno lanzaron mucho antes las advertencias y las llamadas a la responsabilidad. ¿Por qué esperaron a que la flotilla llegase hasta un punto al que no debió llegar y el fregado con los israelíes se consumase? ¿Por qué no movieron un dedo para evitar un conflicto estéril y absurdo? ¿Para qué diablos mandaron al Furor a gastar combustible, cabrear más a los israelíes y darse media vuelta? 

    ¿Sería que el Gobierno también quería bronca (o le convenía que hubiera tensión, como dijo uno una vez)? ¿Sería que le agradaba mucho llenar telediarios y periódicos con las insensateces de Ada, Barbie y Greta, a falta de otras cosas más sustanciosas de las que hablar? Pues así hemos estado más de un mes. Ya se ha terminado la flotilla, ahora empiezan las manifas. Y no olvidemos que en agosto fue la Vuelta Ciclista. ¡La de medidas rotundas que están tomando en España el Gobierno y la izquierda para arreglar lo de Gaza!

lunes, 22 de septiembre de 2025

Escuchemos a los docentes

     A finales del pasado mes de mayo, publique un artículo sobre un libro titulado Laberinto educativo y aprendizaje "fake", cuyo autor es Ramón Espejo. Consistía, como algunos recordaréis, en un interesante viaje por toda la geografía española para entrevistarse con una larga nómina de personas relacionadas con el mundo de la educación -docentes, expertos, intelectuales interesados en ella...-, con el fin de obtener de ese poliédrico enfoque una visión y unas ideas que nos ayudasen a abordar con éxito la resolución de sus problemas.

    Recientemente, en colaboración con unos colegas suyos, Ramón ha puesto en marcha un canal de YouTube que sigue la línea de prestar atención a las voces de quienes puedan tener algo que aportar en beneficio de la enseñanza, pero esta vez focalizado sobre los profesores, como muy bien puede deducirse de su nombre, que os dejo aquí junto con su enlace:

Escuchemos a los docentes

    Está claro que el proyecto se halla aún en proceso de construcción, pero en el apartado titulado Vídeos encontramos ya el que a mi juicio va a ser su principal pilar. Os animo a echar un vistazo y aprovecho para agradecer a Ramón y sus amigos la idea de crear una plataforma de internet que dé audiencia a los profesores, quienes a lo que estamos acostumbrados de toda la vida es más bien a lo contrario: ser silenciados. 

lunes, 15 de septiembre de 2025

Guerra sucia contra la Vuelta a España

     Acaba de terminar la edición de la Vuelta Ciclista a España de 2025, con una victoria propagandística para los sectores políticos que la han estado torpedeando a diario: han conseguido cargarse el evento deportivo, han coseguido presencia en los medios de comunicación del mundo entero y han conseguido asestarle un buen golpe a la imagen de España: éxito completo. Algunos me dirán que no perseguían ninguno de esos objetivos, sino manifestar su condena de los crímenes y atopellos cometidos por Israel en Gaza, y no les negaré que así era, por lo que acepto incluir ese ejercicio del derecho al pataleo entre los logros alcanzados, pero no por ello retiraré los otros tres, que son indiscutibles.

    Y que además eran los verdaderos, eso que nadie lo dude, porque los promotores de los cerriles ataques a la vuelta han mentido: aunque proclamaban que actuaban contra Israel -encarnado en el equipo ciclista Israel-Premier Tech- sus acciones iban dirigidas contra España, como los hechos y sus resultados demuestran sin ningún género de dudas. Hechos: han cortado carreteras españolas, han torpedeado una competición ciclista española de fama y proyección mundial, han impedido el normal desarrollo de parte de sus etapas, han provocado disturbios en España, han ejercido la violencia en España y han agredido a policías españoles. Resultados: ¿han parado la ofensiva israelí en Gaza? No. ¿Han producido en ella el menor influjo? No. ¿Han dañado la imagen israelí en el mundo? En absoluto: está exactamente igual que estaría si estas protestas no se hubieran poducido. En cambio, en lo que se refiere a España, han fastidiado a los aficionados que querían disfrutar de la Vuelta y tenían todo el derecho a ello y, además, han dañado mucho su imagen, pues la han hecho aparecer como un país donde la violencia provocada por unos trogloditas es capaz de alterar seriamente el desarrollo de una competición deportiva de alta categoría. ¿Qué pasaría si mañana España presentase su candidatura a organizar el mundial de ciclismo? Hasta el más imbécil de los rematados imbéciles que han participado en los alborotos lo sabe muy bien: haríamos el ridículo, y la estela de esto durará muchos años. 

    Éxito, pues, insisto, para los instigadores de esta canallesca puñalada trapera a la imagen y la vida tranquila y feliz de España, con lo que resulta muy fácil brujulear para encontrarlos, basta con preguntarse: ¿a quién beneficia?, y la respuesta salta como un rayo: al separatismo, pues es la sentina de odio que más aborrece a España. Y no andaremos errados, pues sabemos que la campaña prendió con fuerza al paso de la Vuelta por las Vascongadas, ¿y quién la organizó allí? Un tal Ibón Meñika, un sujeto que fue condenado a prisión por colaboranción con ETA: cuando la violencia en Gaza la condena alguien que estuvo mezclado con una banda asesina, esa condena se derrumba como un castillo de arena. Y en los altercados de Galicia fue detenida Rosana Prieto, una dirigente del Bloque Nacionalista Galego (BNG). Estas han sido las acémilas que han tirado del carro, pero a él se han subido todos los componentes del resto del bloque Frankenstein, o sea, la izquierda, ya sea la podémico-sumaritana o la del PSOE. De los primeros citaré a Ione Belarra, Sira Rego, Yolanda Díaz o Pablo Fernández; del PSOE la lista no es corta: Adrián Barbón, el delegado del Gobierno en Madrid (cuya bochornosa actuación, como es habitual, dará que hablar), Óscar LópezPedro Sánchez, o sea, el presidente del Gobierno, al que se acusa, y con razón, de haber alentado los graves incidentes de la etapa final en Madrid, que se han saldado con veintidós policías heridos.

    En conclusión, la siniestra alianza que nos tiene hoy secuestrados, en grados diversos de participación, es la responsable del descalabro del que en la edición de este año ha sido víctima la Vuelta a España. Aterra comprobar que los partidos en el poder y personas con altas responsabilidades, llegando nada menos que al presidente del Gobierno, hayan sido capaces de agregarse a un plan destructivo urdido por los cómplices del terrorismo, que hayan impulsado unos disturbios tan violentos y con tan alto componente de desprecio a las leyes, que hayan actuado de forma tan decidida e irresponsable contra los intereses de su propio país. Estos que hoy nos gobiernan son unos incompetentes, unos canallas, unos descerebrados y unos malvados. Lo que ha ocurrido este año con la Vuelta Ciclista a España es gravísimo: un atentado contra la paz ciudadana y los intereses de la nación aplaudido por quienes hubieran debido evitarlo. Somos ya un cachondeo de país, pero no perdamos de vista esto otro: que a Pedro Sánchez no le desagrada la violencia callejera e incluso está dispuesto a apoyarla. Mucho cuidado con esto de cara al futuro, porque me temo que indica que Sánchez, al igual que su amiguito Zapatero, será capaz de utilizar la discordia en beneficio propio.

    Hablando de violencia y para concluir, voy a reproducir unas palabras que pronunció Ione Belarra el pasado sábado. Después de llamar a un "desborde de movilización" que "se sobreponga pacíficamente a la militarización policial", dijo:

    El Gobierno de España, de la mano de los gobiernos (autonómico y municipal) de la señora Ayuso y Almeida, ha militarizado la ciudad de Madrid y toda la comunidad, incluido la sierra, para evitar las manifestaciones propalestinas en el marco de la vuelta ciclista a España.

    Parece ser que, si un gobierno toma medidas contra los alborotadores -cosa que, para empezar, el Gobierno tan solo se ha limitado a fingir que hacía-, está montado un estado de excepción, así "razona" esta cínica agitadora, a la que Sánchez hizo una vez ministra. Y luego está eso de meter a Almeida y Ayuso con calzador, lo dicho: ¿contra quién ha ido este ataque? ¿Contra Israel? ¡Ja-ja-ja! Y en  cuanto a lo de "pacíficamente", véase lo que pasó ayer en Madrid. Estas son las políticas y el talante de Sánchez y sus aliados (1). 


1. Unas horas después de haber terminado este artículo, me topo con uno de esos editoriales viscosos de "El País", titulado "La ceguera de la vuelta", que  viene a decirnos que lo que ejercieron los salvajes que impidieron el desarrollo de etapas, atacaron a policías y agredieron a ciclistas fue "el derecho legítimo de manifestación". ¿Qué pasó según "El País"? Que "la Vuelta no gestionó con sensibilidad, estrategia, diálogo previo y compromiso" esta conspiración. Así que ya lo sabemos: la culpa de los porrazos recibidos por la Vuelta la tuvo la propia Vuelta. Hizo algo mal: no se arrodilló sentó ante los cafres para "dialogar" con ellos, para proceder seguidamente a plegarse a sus caprichos. Bueno, a los que lo conocemos desde 1976, no nos sorprende la manera hipócrita y aberrante en que "El País" pervierte la idea de diálogo y otras igualmente dignas. 

      

martes, 2 de septiembre de 2025

No son las ratios, es la LOMLOE

     Ha comenzado el curso 2025 - 2026 y parece que este año, después de cinco bajo el marco de una catástrofe llamada LOMLOE, los sindicatos de la enseñanza están decididos a movilizarse, o así lo anuncian al menos CCOO y UGT. Tanto ellos como ANPE y CSIF, entre las reivindicaciones que presentan, coinciden en destacar la reducción de ratios, reclamando unos límites generales en la normativa nacional (1), con el fin de que las comunidades autónomas no hagan de su capa un sayo, o sea, trampas. La fijación de unas ratios adecuadas es muy necesaria, pero, si hoy en día los profesores reclaman de forma perentoria la reducción del número de alumnos por aula, es porque la conflictividad escolar se está disparando, a los profesores cada vez se les respeta menos (véanse la parte 1 y la parte 2 de un estudio de CSIF a este respecto) y las clases son cada vez más ingobernables. Y la culpa de esto la tiene la LOMLOE, así que los sindicatos, si fueran honestos y no se dedicasen a devanar un eterno mareo de la perdiz, lo que deberían hacer es ir a la raíz de los males y exigir la derogación de la LOMLOE, una ley nefasta para alumnos, profesores y padres, e incluso para la propia enseñanza española, que, gacias a esta norma, ha caído en el más triste de los destinos imaginables para un sistema educativo: que quienes pasen por él aprendan mucho menos de lo que debieran. O peor aún: no aprendan nada, caso que por desgracia también se da.

    Yo he llegado a dar clases con 40 alumnos de BUP o 35 de EGB, y he trabajado con grupos que fueron buenos o malos independientemente de su número de alumnos: recuerdo haber tenido unos cuantos de más de treinta alumnos que fueron excelentes en todos los sentidos, mientras que, por contra, nunca olvidaré uno de los más complicados que tuve en EGB, que integraban exactamente nueve niños y tres niñas. La conflictividad no depende solo de la ratio, está claro, y ha existido siempre, pero, por la información que me llega a través de diferentes conductos, veo muy claro que los niveles que se están alcanzando hoy en la ingobernabilidad de las clases son más extensos y más intensos que nunca, luego es obvio que algo habrá que hacer. Podrían sernos muy útiles para entender lo que está sucediendo en la actualidad dos testimonios de los que me que me he ocupado en este blog: el de Marc y el de Alba. Nos contaba Alba que se apuntó a un curso para gestión del estrés y relajación, en el que el jeta que lo impartía les puso a abrazar árboles. Cuando nos hallamos en una coyuntura de extrema conflictividad, lo que hay que hacer es atajarla con medidas efectivas, así que una Administración que la afronta dándoles a los profesores cursitos de relajación, sencillamente, los está abandonando, y si además el contenido consiste en abrazar árboles, lo que ha hecho es ascender al peldaño del insulto. Todo esto es muy coherente con lo primerito que hizo: maltratarlos con una ley como la LOMLOE, así que insisto: ¿hacia dónde tendrían que apuntar las tablas reivindicativas de los sindicatos? En cuanto a Marc, alcanzó gran audiencia cuando contó lo desolado que se sintió cuando una clase poblada por salvajes ignoró las llamadas al orden suyas y de otro profesor e incluso uno se permitió faltarle a él al respeto. No diré que estos modos cavernícolas sean de hoy, pero sí lo es que hayan aumentado considerablemente, y también es de hoy ese invento de los dos profesores en una clase: esto es LOMLOE pura y dura, y además me sirve para confirmar mi tesis de que el problema no son las ratios. No lo son: es la LOMLOE y el clima que sus disparates han introducido en la enseñanza. El sustrato sobre el que se elevan episodios como este se compone de una evaluación demencial, un vaciado de los contenidos y el giro hacia el adoctrinamiento y la invasión de lo emocional.

    Muchos llevamos años dando la matraca con estas cosas -incluso desde antes de que en 2020 se implantase este engendro legal, porque no hay que olvidar que es fruto y diabólico perfeccionamiento de la ya demencial LOGSE, y la LOGSE y sus secuelas venimos padeciéndolas desde 1992-, pero algunos parece que han tardado en darse cuenta. En un artículo que se publicó en "El Mundo" el pasado 30 de agosto y que lleva por título esta significativa frase: Los niños no aprenden ni entienden lo que leen, encontramos este testimonio acerca de una madre: 

    Los había matriculado muy ilusionada en un centro público sin libros de texto ni cuadernos, sin deberes obligatorios ni pelota en los recreos. Una escuela donde el comedor había sido rebautizado como "espacio mediodía", la asignatura de Educación Física se llamaba "Cuerpo y Movimiento" y la expresión "padres" había sido sustituida por "familias".

    Peroooo...

     La realidad era que mi hijo mayor no aprendía como es debido. Con ocho años leía con mucha dificultad, escribía números al revés y no sabía restar. Nunca le corregían por miedo al trauma: para evitar señalar sus faltas ortográficas, nos decían que tenía una "ortografía natural".

    Hay bastante más horrores, porque el artículo es largo, pero creo que esto ya es sobradamente ilustrativo. ¿Y cuáles son esos horrores? Las almibaradas fábulas sobre lo chachiguay y al mismo tiempo eficaz que es la enseñanza lúdica e innovadora, fabulas que durante décadas ha ido sembrando el pedagogismo para engañar a los padres y a bastantes profesores, con la inestimable colaboración de casi todo el arco político y de los medios de comunicación -desde ABC hasta La Sexta-, que en 2020 el PSOE cristalizó en la LOMLOE. Pondré algunos ejemplos de los que yo mismo he dejado testimonio: lo de ni libros, ni cuadernos, ni Cristo que lo fundó: María Acaso, los jesuitas de Cataluña; lo de los deberes: Eva Bailén y sus cómplices; lo del comedor: colegio "Martinet" de Ripollet; lo de la pelota y la fobia a la Educación Física (y muchas cosas más, porque lo de estas señoras es un compendio de atrocidades... respaldado por CCOO): Yera Moreno y Melani Penna; lo de adiós, padres y hola, familias: cualquiera de las conspiraciones trans o LGTBI, con su anhelada anulación de la heterosexualidad y de los sexos varonil y femenino. ¡Están todos! Y esta basura se la han ido vendiendo a la gente durante décadas como la excelencia de las excelencias, sin contar lo que de verdad había al final: el hundimiento de la educación, el que los niños no aprendieran ni a leer, ni a escribir, ni a sumar, ni a hacer quebrados, ni quiénes eran los Reyes Católicos, ni dónde está Soria, ni nada de nada; el que se hiciesen niños sin inquietudes, pasivos, perezosos y convencidos de que había que dárselo todo hecho. Y la guinda: que fueran soberbios, maleducados, sin modales ni respeto, incapaces de aceptar una frustración y dispuestos a movilizar los más cínicos resortes de presión familiar o escolar para imponer su voluntad.

    ¿Qué otra cosa podía ser? El desterrar el esfuerzo, las normas, el respeto, los límites y la disciplina solo puede rendir un fruto: alumnos ignorantes y malcriados. Si da lo mismo saber que ignorar y el recurso que se le facilita al profesor para hacer frente al caos es enseñarle a relajarse abrazando árboles, nada importará que la ratio sea de ochenta alumnos por grupo o de diez, porque reducirla no será la solución adecuada. 

    Pues bien, a toda esa demencial empanada de embrutecimiento, el PSOE le añadió baba emocional y un catecismo adoctrinador con carretadas de género, ideología LGTBI, ecologismo acrítico y un sentido de la igualdad social muy sesgado de izquierdismo, y lo ha cuajado en un producto educativo: la LOMLOE. ¿Cuál ha sido el resultado? Que en solo cinco años ya se percibe que los alumnos han sido condenados a la ignorancia y el desacato y las clases solo se pueden controlar si ellos lo permiten.

    El problema de fondo de la enseñanza de hoy es la LOMLOE y no podremos mejorar nada mientras no se derogue esta ley.

    Acostumbrados al despiadado y constante bombardeo de atropellos escandalosos a que nos someten Sánchez, el PSOE y sus aliados, no hemos reparado en esta catastrófica ley, porque su acción es silenciosa y retardada, pero es demoledora, sin duda uno de los peores daños que nos ha infligido esta deplorable alianza. Sus efectos son y serán terribles y nos estarán perjudicando durante muchos años.


1.- En sus documentos, ellos suelen  hablar de normativa estatal, pero, dado que evidentemente se refieren a la emanada del Gobierno central, creo que lo apropiado es hablar de normativa nacional para no crear confusiones, pues la normativa autonómica también es estatal (porque las autonomías también son Estado), pero de alcance limitado al ámbito de cada región. Las razones por las que debemos tener mucho cuidado con los términos territoriales y usarlos con propiedad, las expliqué aquí.

domingo, 24 de agosto de 2025

"Miserias de país pobre" (sobre un artículo de Ricardo Dudda)

    Empezaré por decir que solo conozco a Ricardo Dudda por haber leído algunos artículos suyos en "The Objective" y que la mayor cantidad de información sobre este autor que he podido hallar estaba en una entrevista que concedió hará un par de años a la revista "Qué leer", de manera que el hecho de que me haya decidido hoy a reflexionar sobre su artículo titulado Miserias de país pobre obedece solo a las impresiones que me ha causado lo que en él sostiene. Quienes deduzcáis que el motivo es que esas impresiones son desagradables habéis acertado, y mi disgusto procede del pesimismo que transmite el artículo, pero también de que pienso que el autor lo fundamenta en razones muy torcidas.

    Comienza censurando el cruce de acusaciones que los partidos políticos -sobre todo, el PP y el PSOE- han emprendido por la pavorosa ola de incendios que sufre hoy España, señalando cada uno al adversario como culpable de la catástrofe. Comparto la condena del señor Dudda, pero no un importante matiz: aunque es verdad que los dos contendientes están participando en esta incomprensible disputa, no es pertinente la universalización que él hace cuando sostiene que la perversión de eludir las propias responsabilidades cargándoselas al adversario es un mal de todos los políticos, porque en la infortunada España de hoy, como muchos otros, lo introdujo Pedro Sánchez y es quien más lo practica y lo azuza. El propio señor Dudda apunta hacia esta clave con estas palabras:

    Ocurrió después de la dana, ocurrió después del apagón, está ocurriendo durante los incendios. El primer resorte que se activa en la silla del político es el de la búsqueda de responsables, no de soluciones.

    Es claro como la luz del día: si ampliamos el foco hacia otras emergencias, se ve con nitidez que la trampa de embarrar la actualidad con falsas acusaciones para tapar su incuria ha sido siempre el Gobierno sanchista quien la ha utilizado, con el inicuo resultado de arrastrar a todos al fango, ¡premio para el más canalla una vez más!, pero ya le llegarán las duras, quizás no estén tan lejanas.

    Así pues, en este asunto, el panorama no es tan negro como lo pinta el señor Dudda, porque, aunque es verdad que la virtud de los políticos en general no justificaría que nos pusiésemos a dar saltos de alegría, tampoco alcanzan todos los escalofriantes registros de suciedad que vemos hoy en España, esos que son de la exclusiva propiedad de Pedro Sánchez y su banda. Del mismo modo, debería atemperarse su pesimismo en lo que defiende a continuación, eso de que la dejación de los responsables políticos convierte a España en un estado fallido con los españoles abandonados a su suerte; no hay tal: aunque con errores, negligencias, disfunciones y mazonadas, en todas las catástrofes -incluyo también la pandemia o la erupción de La Palma- ha habido instancias procedentes de ese Estado supuestamente fallido que han funcionado, que se pare a reflexionar y haga memoria quien no lo vea así, porque, si me pongo a traer ejemplos, lleno cien páginas, aunque, si de lo que hablamos es de dejación, nuevamemente hay que señalar a los mismos: Sánchez y su Gobierno: la reiterada y miserable pasividad de la señora Robles (por la que entiendo que alguna vez tendrá que responder); las prolongadas desapariciones de Sánchez (la India, la Mareta); la opacidad sobre el apagón; la comisión de expertos inexistente (alguna vez Simón, Illa y Sánchez tendrán que explicar esta broma macabra) y un largo etcétera. Hay que decirle que no al señor Dudda: España no es un Estado fallido, aunque algunos lleven años (Sánchez) o siglos (el separatismo) intentando que lo sea. Y ya, eso otro que dice de que España es un país pobre... Creo que, estando el mundo como está en lo tocante a pobreza, es un disparate afirmarlo, lo que valdría también para esa exageración del Estado fallido. Si uno escribe en un periódico, damos por supuesto que está bien informado. No, España no es nada de eso, aunque es cierto que hoy está bastante j _ di _ a, por razones que el señor Dudda seguro que no desconoce.

    Reproduciré para finalizar el último párrafo de su artículo, que quizás sea lo que de verdad me ha disgustado:

    El único ascensor que funciona en España (y es un ascensor muy modesto, te sube solo dos o tres pisos en la mayoría de los casos) es la herencia. La gran brecha que viene es la de los millenials que heredarán y los que no. El otro ascensor social, también modestísimo, son las oposiciones: el joven español urbano, formado y cosmopolita tiene sueños húmedos con trabajos de chupatintas. Y lo entiendo. Pero son miserias de país pobre, improductivo. El pequeñorrentismo y el funcionariado como únicas esperanzas de prosperidad. Y la caridad de los de tu alrededor como único colchón.

    Qué triste. Cuánto cinismo, cuánto derrotismo, cuánta falsaria exageración. No es esto lo que necesitan quienes hoy están amenazados por unos sueldos de vergüenza y una vivienda disparada. O a lo mejor he leído mal, a lo mejor esto es solo pose, y no lo que de verdad piensa el señor Dudda, a quien quizás no se le ocurría nada para el artículo de hoy y por eso ha decidido ponerse estupendo. Esto sería un gran alivio, lo digo en serio, porque, de lo contrario, este párrafo sería una enorme incongruencia y una forma majadera de terminar un artículo majadero, que parece que a lo que invita, una vez constatado que todos los políticos son unas hienas (mentira) y que España es un Estado fallido  (mentira) y un país pobre (mentira), es a quedarnos en casa pasivamente jugando a la play y rumiando nuestro pesimismo, pero confortados, eso sí, por nuestra olímpica superioridad sobre esos pequeñorrentistas, chupatintas y menesterosos que nos rodean, infelices que aspiran a subir, a lo sumo, tres pisos más arriba. Dejando aparte esas bobadas melodramáticas de la caridad y el pequeñorrentismo, y ese desprecio a quienes hacen oposiciones (¿a cuántas de las muchas que se convocan el señor Dudda no podría ni presentarse?), habría que preguntarle qué se imagina él que es el mundo. ¿Se cree que se atan los perros con longaniza? Pues no: de algo hay que vivir.  ¿Cuántos seres humanos habrá a los que jamás les resultará posible pasar de la segunda o la tercera planta y no dejarán por ello de ser dignos y dichosos? ¿Cuántos millones de personas viven de oficios humildísimos y a la vez ilusionadas con el también humildísimo horizonte de ser felices y que no les falten esos trabajillos que les dan casa y sustento? ¿A qué viene pontificar sobre brechas sociales si a todos esos los estás despreciando, como a los chupatintas o a los que tienen la desgracia de heredar un pequeño negocio y pretender vivir de él? No sé a qué altísimo piso habrá llevado el ascensor social al señor Dudda, pero, si mira a los de abajo como si fueran insectos, debería abstenerse de reflexiones comprometidas. Y, por cierto, en España funciona al menos otro ascensor social: el de la educación, y aún me atrevería a decir que el del trabajo duro tampoco es una chatarra inservible. Los dos han estado siempre ahí dando óptimos resultados, y ahí siguen para quien quiera utilizarlos. Que hoy en día España esté en manos de una horda de corruptos miserables no quiere decir que se haya convertido en una escombrera desolada y sin esperanzas.

viernes, 15 de agosto de 2025

Batalla / Ninet

     A finales del pasado mes de julio, destapó "El Mundo" la falsificación -supuesta, ni que decir tiene- del título de diplomado sobre el que José María Ángel Batalla, destacado miembro del PSOE valenciano, ha fundamentado una carrera administrativa, profesional y política de alrededor de cuarenta años. Falsificar títulos es un delito bastante grave, pues es habilitar para el desempeño de ciertos oficios o funciones a quienes en realidad no están capacitados para ello, pero, si lo perpetra alguien como el señor Ángel Batalla, que ha ejercido muy altos cargos públicos y en su momento fue presentado por su partido como el referente ético con la talla suficiente para ocupar el cargo de comisionado especial para la reconstrucción por los daños ocasionados por la dana de 2024 (con una remuneración de más de 120.000 euros al año), se convierte en un escándalo de grandes dimensiones. Por suerte para él, gracias a la cascada de abusos, corrupción e incumplimientos de la ley que Pedro Sánchez ha vertido y vierte sobre España, lo suyo ha quedado como un granito más en una tormenta de arena.  

    Pocos días después, la Diputación de Valencia abrió un expediente contra la esposa de Batalla, Carmen Ninet, quien hasta ese momento había estado ejerciendo como subdirectora del Museo Valenciano de Ilustración y Modernidad, un cargo para el que es preciso un título de licenciado o equivalente, requisito que la señora Ninet no cumple. Superado el plazo que la Diputación le concedió para demostrar que sí lo cumplía, a la vista de su oneroso silencio, ha sido destituida. A lo largo de los nueve años que ha estado ocupando indebidamente ese cargo, según calculan algunos, ha ganado 720.000 euros, una cantidad que es muy probable que sea mayor, pues en la actualidad ganaba 104.634. Habida cuenta de que es posible que no tenga ni el Bachillerato, se ha embolsado irregularmente un dineral que, en el sector público, sería inalcanzable para alguien con sus méritos.

    Los chanchullos de esta ejemplar pareja están ahora en fase de investigación, con el fin de determinar cómo se les penaliza. ¿Cómo se les penaliza he dicho? ¡Qué ingenuidad! Será mejor que quienes vivimos en esa ficción de que quien la hace la paga no nos hagamos ilusiones, porque acerca del señor Batalla, aunque es verdad que ya ha tenido que renunciar al nada despreciable chollo de comisionado y tal, lo que más se oye es que, en el caso de que se demostrase que ha cometido falsedad en documento, no le pasaría nada, porque el delito habría prescrito. En cuanto a la señora Ninet, lo suyo es todavía más kafkiano, porque con lo que se especula es con que la van a recolocar en algún puestecillo que salga por ahí, el cual tendría que ser, dadas sus no-titulaciones, de la escala funcionarial más baja, la E, pero resulta que, como ha estado nueve años ejerciendo (😂😂😂) uno de la más alta, la A-1, ya podría haber consolidado el derecho a percibir ciertos complementos propios de esta ¡y no se le podrían arrebatar! 

    Las preguntas que todos nos hacemos son estas: si, dadas sus titulaciones falsas o inexistentes, jamás deberían haber ocupado los puestos que usurparon, ¿no sería lo lógico que no pudiesen disfrutar de derechos a los que en realidad no tenían derecho? ¿No deberían directamente ser penalizados? ¿No deberían reintegrar el dinero público que se embolsaron sin que les correspondiera? ¿No deberíamos replantearnos eso de las prescripciones? Bien, en todo caso, el asunto está en fase de estudio, así que toca esperar para ver cómo se resuelve al final.

    Aparte de lo dicho hasta ahora, esta la incógnita de la ascensión: ¿cómo les fue posible a estas personas trepar tan alto con esas carencias? ¿A quién le coló el señor Batalla ese título tan burdamente falsificado (burdo 1, burdo 2) para pasar de una categoría que no lo precisaba a otra que sí? ¿Hubo negligencia, incompetencia o complicidad? Habrá que ver. Lo de la señora Ninet tiene otros matices. Entró como laboral, o sea, que no es funcionaria de carrera, y una vez "dentro de la casa" tendría la trayectoria que tuviera, hasta que la colocaron en un sitio para el que no estaba acreditada y todo se vino abajo. Me parece inexplicable que llegara a esa subdirección sin el concurso de otras personas que la encaminaran y la nombraran, así que me temo que en esta película aún faltan personajes, ¿se acabará hablando de prevaricación? Sea lo que sea, todo huele que apesta. Por lo que he leído por ahí, la familia de Carmen Ninet ha estado siempre vinculada al PSOE, algunos hablan incluso de dinastía. Entre sus mayores, están los fundadores del PSOE valenciano y ahora están todos colocaditos y volcaditos en la política, ¡qué casualidad! Y qué casualidad igualmente que ella y su marido (familia también, nótese) hayan coincidido en tener la dicha, cada uno a su manera (tramposa en ambos casos), de ascender en la Administración hasta buenos puestos que les estaban vedados por su carencia de títulos. ¿Estaremos ante un caso de caciquismo político en la Comunidad Valenciana? ¿Será ese caciquismo tan poderoso que tendrá la facultad de colocar en buenos puestos públicos a los hijos de "buenas familias" socialistas por enchufe o por fraude, despreciando los méritos y los requisitos legales? Habrá que verlo. Y otra cosa: ¿será solo en la Comunidad Valenciana?

    Si este asunto se reduce al matrimonio Batalla - Ninet sería un caso deplorable, pero, si es un síntoma de algo más extendido, podría estar avisándonos de la corrosión de la Administración española. Si hemos llegado a esa catástrofe, esta historieta debería preocuparnos mucho más de lo que parece hacerlo.