El título de este artículo coincide con el del libro escrito por Ramón Espejo Romero que publicó el pasado mes de marzo la editorial Brief (1). Comienza con un prólogo en el que Javier Orrico se pregunta cómo ha sido posible que, con las mejores condiciones materiales de los últimos cincuenta años, lo único que se haya conseguido sea hundir calamitosamente el nivel de instrucción de nuestros jóvenes y sus virtudes más propicias para el aprendizaje. Achaca este desastre a ocho trampantojos que, a su modo de ver, constituyen los sólidos pilares sobre los que se ha asentado el disparate logsiano. Viene a continuación una introducción del autor en la que nos propone un viaje auténtico y no meramente turístico, es decir, uno de esos viajes interesados sobre todo en la cantidad y profundidad de cosas que podemos llegar a conocer. El destino de ese viaje será el mundo de la educación y la introducción se cierra con estas palabras: "Para aprender (y viajar) tenemos que ir allí donde nos vamos a sentir incómodos, perdidos, y yo no he esquivado estos lugares".
Con estos planteamientos, difícilmente se podría rechazar la invitación que se nos presenta, y no seré yo quien recomiende hacerlo, porque ese largo, denso y enriquecedor periplo es el libro que ha escrito Ramón, un colosal trabajo en el que ha acudido a mil puntos de toda España, incluida la insular, para hablar cara a cara con una larga serie de personas que él considera que tienen algo que decir en torno a la enseñanza de hoy en nuestro país. La serie la componen exactamente ochenta y cuatro entrevistados, que podrían haber sido unos cuantos más, pero hubo un puñado de elegidos que se negaron a hablar con Ramón, con la consecuencia de que su silencio ha resultado sin duda más elocuente que lo que hubieran sido sus palabras. Móntense al tren, únanse al viaje, háganme caso, no les va a decepcionar.
El propósito de Ramón ha sido reunir en la misma ágora las voces procedentes de todos los ángulos posibles, con las coincidencias y discrepancias que pudiese haber entre los distintos enfoques: indiferentes, apocalíticos, integrados, innovadores, tradicionales, políticos, profesores, inspectores, pedagogos... En efecto: están todas las tribus, y no pasemos por alto que a esta diversidad de escuelas se une la abundancia de posturas personales, con lo cual el cuadro resultante es de una extremada riqueza de matices. ¿Y no será también una jaula de grillos?
No me lo ha parecido en absoluto, porque la polifonía de este libro tiene dos grandes virtudes. La primera es evidente: el escuchar las voces de muchos actores enriquece nuestro conocimiento del mundo educativo y la diversidad de situaciones, problemas y propuestas que envuelve. La segunda y paradójica es que, conforme vamos avanzando en la lectura, la discordancia se va convitiendo en armonía y va surgiendo una melodía clara, ya que van tomando forma las situaciones predominantes, los problemas de más envergadura y las propuestas que tienen mayor aceptación (y también las debilidades y fortalezas de cada una).
Eso permitirá a cada lector extraer del conjunto sus conclusiones, cosa a la que el autor dedica el último apartado, que encierra una recapitulación, una síntesis y una presentación de propuestas. La conclusión más clara -y evidente- es que tenemos que hablar; tenemos que lograr por fin ese gran diálogo sobre la educación y ese gran pacto que tanto tiempo se está posponiendo, porque urge poner fin al desastre educativo que llevamos padeciendo más de treinta años, que con la LOMLOE ha alcanzado unos extremos inquietantes. Y hablar implica manifestar las opiniones y respetar las críticas, porque es inconcebible la autocomplacencia en que se ha blindado el poder educativo, cuando pilota una nave con excesivas vías de agua, como lo es también la acritud con que se reciben las discrepancias, tan impropia de un país democrático, que ha llevado a muchísimos a refugiarse en un silencio que no por prudente deja de ser lamentable. Este libro podría ser un precedente de ese gran diálogo.
1.- Aquí tenéis la ficha editorial: Laberinto educativo.
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