Libros que he publicado

-2028. ¿Cómo será la Tercera República? -LA ESCUELA INSUSTANCIAL. Sobre la urgente necesidad de derogar la LOMLOE. -EL CAZADOR EMBOSCADO. Novela. ¿Es posible reinsertar a un violador asesino? -EL VIENTO DEL OLVIDO. Una historia real sobre dos asesinados en la retaguardia republicana. -JUNTA FINAL. Un relato breve que disecciona el mercadeo de las juntas de evaluación (ACCESO GRATUITO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA). -CRÓNICAS DE LAS TINIEBLAS. Tres novelas breves de terror. -LO QUE ESTAMOS CONSTRUYENDO. Conflictividad, vaciado de contenidos y otros males de la enseñanza actual. -EL MOLINO DE LA BARBOLLA. Novela juvenil. Una historia de terror en un marco rural. -LA REPÚBLICA MEJOR. Para que no olvidemos a los cientos de jóvenes a los que destrozó la mili. -EL ÁNGULO OSCURO. Novela juvenil. Dos chicos investigan la muerte de una compañera de instituto. PULSANDO LAS CUBIERTAS (en la columna de la derecha), se accede a información más amplia. Si os interesan, mandadme un correo a esta dirección:
repmejor@gmail.com

Tenéis información de los precios aquí:

martes, 2 de septiembre de 2025

No son las ratios, es la LOMLOE

     Ha comenzado el curso 2025 - 2026 y parece que este año, después de cinco bajo el marco de una catástrofe llamada LOMLOE, los sindicatos de la enseñanza están decididos a movilizarse, o así lo anuncian al menos CCOO y UGT. Tanto ellos como ANPE y CSIF, entre las reivindicaciones que presentan, coinciden en destacar la reducción de ratios, reclamando unos límites generales en la normativa nacional (1), con el fin de que las comunidades autónomas no hagan de su capa un sayo, o sea, trampas. La fijación de unas ratios adecuadas es muy necesaria, pero, si hoy en día los profesores reclaman de forma perentoria la reducción del número de alumnos por aula, es porque la conflictividad escolar se está disparando, a los profesores cada vez se les respeta menos (véanse la parte 1 y la parte 2 de un estudio de CSIF a este respecto) y las clases son cada vez más ingobernables. Y la culpa de esto la tiene la LOMLOE, así que los sindicatos, si fueran honestos y no se dedicasen a devanar un eterno mareo de la perdiz, lo que deberían hacer es ir a la raíz de los males y exigir la derogación de la LOMLOE, una ley nefasta para alumnos, profesores y padres, e incluso para la propia enseñanza española, que, gacias a esta norma, ha caído en el más triste de los destinos imaginables para un sistema educativo: que quienes pasen por él aprendan mucho menos de lo que debieran. O peor aún: no aprendan nada, caso que por desgracia también se da.

    Yo he llegado a dar clases con 40 alumnos de BUP o 35 de EGB, y he trabajado con grupos que fueron buenos o malos independientemente de su número de alumnos: recuerdo haber tenido unos cuantos de más de treinta alumnos que fueron excelentes en todos los sentidos, mientras que, por contra, nunca olvidaré uno de los más complicados que tuve en EGB, que integraban exactamente nueve niños y tres niñas. La conflictividad no depende solo de la ratio, está claro, y ha existido siempre, pero, por la información que me llega a través de diferentes conductos, veo muy claro que los niveles que se están alcanzando hoy en la ingobernabilidad de las clases son más extensos y más intensos que nunca, luego es obvio que algo habrá que hacer. Podrían sernos muy útiles para entender lo que está sucediendo en la actualidad dos testimonios de los que me que me he ocupado en este blog: el de Marc y el de Alba. Nos contaba Alba que se apuntó a un curso para gestión del estrés y relajación, en el que el jeta que lo impartía les puso a abrazar árboles. Cuando nos hallamos en una coyuntura de extrema conflictividad, lo que hay que hacer es atajarla con medidas efectivas, así que una Administración que la afronta dándoles a los profesores cursitos de relajación, sencillamente, los está abandonando, y si además el contenido consiste en abrazar árboles, lo que ha hecho es ascender al peldaño del insulto. Todo esto es muy coherente con lo primerito que hizo: maltratarlos con una ley como la LOMLOE, así que insisto: ¿hacia dónde tendrían que apuntar las tablas reivindicativas de los sindicatos? En cuanto a Marc, alcanzó gran audiencia cuando contó lo desolado que se sintió cuando una clase poblada por salvajes ignoró las llamadas al orden suyas y de otro profesor e incluso uno se permitió faltarle a él al respeto. No diré que estos modos cavernícolas sean de hoy, pero sí que lo es lo que se han generalizado, y también es de hoy ese invento de los dos profesores en una clase: esto es LOMLOE pura y dura, y además me sirve para confirmar mi tesis de que el problema no son las ratios. No lo son: es la LOMLOE y el clima que sus disparates han introducido en la enseñanza. El sustrato sobre el que se elevan episodios como este se compone de una evaluación demencial, un vaciado de los contenidos y el giro hacia el adoctrinamiento y la invasión de lo emocional.

    Muchos llevamos años dando la matraca con estas cosas -incluso desde antes de que en 2020 se implantase este engendro legal, porque no hay que olvidar que es fruto y diabólico perfeccionamiento de la ya demencial LOGSE, y la LOGSE y sus secuelas venimos padeciéndolas desde 1992-, pero algunos parece que han tardado en darse cuenta. El un artículo que se publicó en "El Mundo" el pasado 30 de agosto y que lleva por título esta significativa frase: Los niños no aprenden ni entienden lo que leen, encontramos este testimonio acerca de una madre: 

    Los había matriculado muy ilusionada en un centro público sin libros de texto ni cuadernos, sin deberes obligatorios ni pelota en los recreos. Una escuela donde el comedor había sido rebautizado como "espacio mediodía", la asignatura de Educación Física se llamaba "Cuerpo y Movimiento" y la expresión "padres" había sido sustituida por "familias"

    Peroooo...

     La realidad era que mi hijo mayor no aprendía como es debido. Con ocho años leía con mucha dificultad, escribía números al revés y no sabía restar. Nunca le corregían por miedo al trauma: para evitar señalar sus faltas ortográficas, nos decían que tenía una "ortografía natural".

    Hay bastante más horrores, porque el artículo es largo, pero creo que esto ya es sobradamente ilustrativo. ¿Y cuáles son esos horrores? Las almibaradas fábulas sobre lo chachiguay y al mismo tiempo eficaz que es la enseñanza lúdica e innovadora, fabulas que durante décadas ha ido sembrando el pedagogismo para engañar a los padres y a bastantes profesores, con la inestimable colaboración de casi todo el arco político y de los medios de comunicación -desde ABC hasta La Sexta-, que en 2020 el PSOE cristalizó en la LOMLOE. Pondré algunos ejemplos de los que yo mismo he dejado testimonio: lo de ni libros, ni cuadernos, ni Cristo que lo fundó: María Acaso, los jesuitas de Cataluña; lo de los deberes: Eva Bailén y sus cómplices; lo del comedor: colegio "Martinet" de Ripollet; lo de la pelota y la fobia a la Educación Física (y muchas cosas más, porque lo de estas señoras es un compendio de atrocidades... respaldado por CCOO): Yera Moreno y Melani Penna; lo de adiós, padres y hola, familias: cualquiera de las conspiraciones trans o LGTBI, con su anhelada anulación de la heterosexualidad y de los sexos varonil y femenino. ¡Están todos! Y esta basura se la han ido vendiendo a la gente durante décadas como la excelencia de las excelencias, sin contar lo que de verdad había al final: el hundimiento de la educación, el que los niños no aprendieran ni a leer, ni a escribir, ni a sumar, ni a hacer quebrados, ni quiénes eran los Reyes Católicos, ni dónde está Soria, ni nada de nada; el que se hiciesen niños sin iniciativa, pasivos, perezosos y convencidos de que había que dárselo todo hecho. Y la guinda: que fueran soberbios, maleducados, sin modales ni respeto, incapaces de aceptar una frustración y dispuestos a movilizar los más cínicos resortes de presión familiar o escolar para imponer su voluntad.

    ¿Qué otra cosa podía ser? El desterrar el esfuerzo, las normas, el respeto, los límites y la disciplina solo puede rendir un fruto: alumnos ignorantes y malcriados. Si da lo mismo saber que ignorar y el recurso que se le facilita al profesor para hacer frente al caos es enseñarle a relajarse abrazando árboles, nada importará que la ratio sea de ochenta alumnos por grupo o de diez, porque reducirla no será la solución adecuada. 

    Pues bien, a toda esa demencial empanada de embrutecimiento, el PSOE le añadió baba emocional y un catecismo adoctrinador con carretadas de género, ideología LGTBI, ecologismo acrítico y un sentido de la igualdad social muy sesgado de izquierdismo y lo ha cuajado en un producto educativo: la LOMLOE. ¿Cuál ha sido el resultado? Que en solo cinco años ya se percibe que los alumnos han sido condenados a la ignorancia y el desacato y las clases solo se pueden controlar si ellos lo permiten.

    El problema de fondo de la enseñanza de hoy es la LOMLOE y no podremos mejorar nada mientras no se derogue esta ley.

    Acostumbrados al despiadado y constante bombardeo de atropellos escandalosos a que nos someten Sánchez, el PSOE y sus aliados, no hemos reparado en esta catastrófica ley, porque su acción es silenciosa y retardada, pero es demoledora, sin duda uno de los peores daños que nos ha infligido esta deplorable alianza. Sus efectos son y serán terribles y nos estarán perjudicando durante muchos años.


1.- En sus documentos, ellos suelen  hablar de normativa estatal, pero, dado que evidentemente se refieren a la emanada del Gobierno central, creo que lo apropiado es hablar de normativa nacional para no crear confusiones, pues la normativa autonómica también es estatal (porque las autonomías también son Estado), pero de alcance limitado al ámbito de cada región. Las razones por las que debemos tener mucho cuidado con los términos territoriales y usarlos con propiedad, las expliqué aquí.

domingo, 24 de agosto de 2025

"Miserias de país pobre" (sobre un artículo de Ricardo Dudda)

    Empezaré por decir que solo conozco a Ricardo Dudda por haber leído algunos artículos suyos en "The Objective" y que la mayor cantidad de información sobre este autor que he podido hallar estaba en una entrevista que concedió hará un par de años a la revista "Qué leer", de manera que el hecho de que me haya decidido hoy a reflexionar sobre su artículo titulado Miserias de país pobre obedece solo a las impresiones que me ha causado lo que en él sostiene. Quienes deduzcáis que el motivo es que esas impresiones son desagradables habéis acertado, y mi disgusto procede del pesimismo que transmite el artículo, pero también de que pienso que el autor lo fundamenta en razones muy torcidas.

    Comienza censurando el cruce de acusaciones que los partidos políticos -sobre todo, el PP y el PSOE- han emprendido por la pavorosa ola de incendios que sufre hoy España, señalando cada uno al adversario como culpable de la catástrofe. Comparto la condena del señor Dudda, pero no un importante matiz: aunque es verdad que los dos contendientes están participando en esta incomprensible disputa, no es pertinente la universalización que él hace cuando sostiene que la perversión de eludir las propias responsabilidades cargándoselas al adversario es un mal de todos los políticos, porque en la infortunada España de hoy, como muchos otros, lo introdujo Pedro Sánchez y es quien más lo practica y lo azuza. El propio señor Dudda apunta hacia esta clave con estas palabras:

    Ocurrió después de la dana, ocurrió después del apagón, está ocurriendo durante los incendios. El primer resorte que se activa en la silla del político es el de la búsqueda de responsables, no de soluciones.

    Es claro como la luz del día: si ampliamos el foco hacia otras emergencias, se ve con nitidez que la trampa de embarrar la actualidad con falsas acusaciones para tapar su incuria ha sido siempre el Gobierno sanchista quien la ha utilizado, con el inicuo resultado de arrastrar a todos al fango, ¡premio para el más canalla una vez más!, pero ya le llegarán las duras, quizás no estén tan lejanas.

    Así pues, en este asunto, el panorama no es tan negro como lo pinta el señor Dudda, porque, aunque es verdad que la virtud de los políticos en general no justificaría que nos pusiésemos a dar saltos de alegría, tampoco alcanzan todos los escalofriantes registros de suciedad que vemos hoy en España, esos que son de la exclusiva propiedad de Pedro Sánchez y su banda. Del mismo modo, debería atemperarse su pesimismo en lo que defiende a continuación, eso de que la dejación de los responsables políticos convierte a España en un estado fallido con los españoles abandonados a su suerte; no hay tal: aunque con errores, negligencias, disfunciones y mazonadas, en todas las catástrofes -incluyo también la pandemia o la erupción de La Palma- ha habido instancias procedentes de ese Estado supuestamente fallido que han funcionado, que se pare a reflexionar y haga memoria quien no lo vea así, porque, si me pongo a traer ejemplos, lleno cien páginas, aunque, si de lo que hablamos es de dejación, nuevamemente hay que señalar a los mismos: Sánchez y su Gobierno: la reiterada y miserable pasividad de la señora Robles (por la que entiendo que alguna vez tendrá que responder); las prolongadas desapariciones de Sánchez (la India, la Mareta); la opacidad sobre el apagón; la comisión de expertos inexistente (alguna vez Simón, Illa y Sánchez tendrán que explicar esta broma macabra) y un largo etcétera. Hay que decirle que no al señor Dudda: España no es un Estado fallido, aunque algunos lleven años (Sánchez) o siglos (el separatismo) intentando que lo sea. Y ya, eso otro que dice de que España es un país pobre... Creo que, estando el mundo como está en lo tocante a pobreza, es un disparate afirmarlo, lo que valdría también para esa exageración del Estado fallido. Si uno escribe en un periódico, damos por supuesto que está bien informado. No, España no es nada de eso, aunque es cierto que hoy está bastante j _ di _ a, por razones que el señor Dudda seguro que no desconoce.

    Reproduciré para finalizar el último párrafo de su artículo, que quizás sea lo que de verdad me ha disgustado:

    El único ascensor que funciona en España (y es un ascensor muy modesto, te sube solo dos o tres pisos en la mayoría de los casos) es la herencia. La gran brecha que viene es la de los millenials que heredarán y los que no. El otro ascensor social, también modestísimo, son las oposiciones: el joven español urbano, formado y cosmopolita tiene sueños húmedos con trabajos de chupatintas. Y lo entiendo. Pero son miserias de país pobre, improductivo. El pequeñorrentismo y el funcionariado como únicas esperanzas de prosperidad. Y la caridad de los de tu alrededor como único colchón.

    Qué triste. Cuánto cinismo, cuánto derrotismo, cuánta falsaria exageración. No es esto lo que necesitan quienes hoy están amenazados por unos sueldos de vergüenza y una vivienda disparada. O a lo mejor he leído mal, a lo mejor esto es solo pose, y no lo que de verdad piensa el señor Dudda, a quien quizás no se le ocurría nada para el artículo de hoy y por eso ha decidido ponerse estupendo. Esto sería un gran alivio, lo digo en serio, porque, de lo contrario, este párrafo sería una enorme incongruencia y una forma majadera de terminar un artículo majadero, que parece que a lo que invita, una vez constatado que todos los políticos son unas hienas (mentira) y que España es un Estado fallido  (mentira) y un país pobre (mentira), es a quedarnos en casa pasivamente jugando a la play y rumiando nuestro pesimismo, pero confortados, eso sí, por nuestra olímpica superioridad sobre esos pequeñorrentistas, chupatintas y menesterosos que nos rodean, infelices que aspiran a subir, a lo sumo, tres pisos más arriba. Dejando aparte esas bobadas melodramáticas de la caridad y el pequeñorrentismo, y ese desprecio a quienes hacen oposiciones (¿a cuántas de las muchas que se convocan el señor Dudda no podría ni presentarse?), habría que preguntarle qué se imagina él que es el mundo. ¿Se cree que se atan los perros con longaniza? Pues no: de algo hay que vivir.  ¿Cuántos seres humanos habrá a los que jamás les resultará posible pasar de la segunda o la tercera planta y no dejarán por ello de ser dignos y dichosos? ¿Cuántos millones de personas viven de oficios humildísimos y a la vez ilusionadas con el también humildísimo horizonte de ser felices y que no les falten esos trabajillos que les dan casa y sustento? ¿A qué viene pontificar sobre brechas sociales si a todos esos los estás despreciando, como a los chupatintas o a los que tienen la desgracia de heredar un pequeño negocio y pretender vivir de él? No sé a qué altísimo piso habrá llevado el ascensor social al señor Dudda, pero, si mira a los de abajo como si fueran insectos, debería abstenerse de reflexiones comprometidas. Y, por cierto, en España funciona al menos otro ascensor social: el de la educación, y aún me atrevería a decir que el del trabajo duro tampoco es una chatarra inservible. Los dos han estado siempre ahí dando óptimos resultados, y ahí siguen para quien quiera utilizarlos. Que hoy en día España esté en manos de una horda de corruptos miserables no quiere decir que se haya convertido en una escombrera desolada y sin esperanzas.

viernes, 15 de agosto de 2025

Batalla / Ninet

     A finales del pasado mes de julio, destapó "El Mundo" la falsificación -supuesta, ni que decir tiene- del título de diplomado sobre el que José María Ángel Batalla, destacado miembro del PSOE valenciano, ha fundamentado una carrera administrativa, profesional y política de alrededor de cuarenta años. Falsificar títulos es un delito bastante grave, pues es habilitar para el desempeño de ciertos oficios o funciones a quienes en realidad no están capacitados para ello, pero, si lo perpetra alguien como el señor Ángel Batalla, que ha ejercido muy altos cargos públicos y en su momento fue presentado por su partido como el referente ético con la talla suficiente para ocupar el cargo de comisionado especial para la reconstrucción por los daños ocasionados por la dana de 2024 (con una remuneración de más de 120.000 euros al año), se convierte en un escándalo de grandes dimensiones. Por suerte para él, gracias a la cascada de abusos, corrupción e incumplimientos de la ley que Pedro Sánchez ha vertido y vierte sobre España, lo suyo ha quedado como un granito más en una tormenta de arena.  

    Pocos días después, la Diputación de Valencia abrió un expediente contra la esposa de Batalla, Carmen Ninet, quien hasta ese momento había estado ejerciendo como subdirectora del Museo Valenciano de Ilustración y Modernidad, un cargo para el que es preciso un título de licenciado o equivalente, requisito que la señora Ninet no cumple. Superado el plazo que la Diputación le concedió para demostrar que sí lo cumplía, a la vista de su oneroso silencio, ha sido destituida. A lo largo de los nueve años que ha estado ocupando indebidamente ese cargo, según calculan algunos, ha ganado 720.000 euros, una cantidad que es muy probable que sea mayor, pues en la actualidad ganaba 104.634. Habida cuenta de que es posible que no tenga ni el Bachillerato, se ha embolsado irregularmente un dineral que, en el sector público, sería inalcanzable para alguien con sus méritos.

    Los chanchullos de esta ejemplar pareja están ahora en fase de investigación, con el fin de determinar cómo se les penaliza. ¿Cómo se les penaliza he dicho? ¡Qué ingenuidad! Será mejor que quienes vivimos en esa ficción de que quien la hace la paga no nos hagamos ilusiones, porque acerca del señor Batalla, aunque es verdad que ya ha tenido que renunciar al nada despreciable chollo de comisionado y tal, lo que más se oye es que, en el caso de que se demostrase que ha cometido falsedad en documento, no le pasaría nada, porque el delito habría prescrito. En cuanto a la señora Ninet, lo suyo es todavía más kafkiano, porque con lo que se especula es con que la van a recolocar en algún puestecillo que salga por ahí, el cual tendría que ser, dadas sus no-titulaciones, de la escala funcionarial más baja, la E, pero resulta que, como ha estado nueve años ejerciendo (😂😂😂) uno de la más alta, la A-1, ya podría haber consolidado el derecho a percibir ciertos complementos propios de esta ¡y no se le podrían arrebatar! 

    Las preguntas que todos nos hacemos son estas: si, dadas sus titulaciones falsas o inexistentes, jamás deberían haber ocupado los puestos que usurparon, ¿no sería lo lógico que no pudiesen disfrutar de derechos a los que en realidad no tenían derecho? ¿No deberían directamente ser penalizados? ¿No deberían reintegrar el dinero público que se embolsaron sin que les correspondiera? ¿No deberíamos replantearnos eso de las prescripciones? Bien, en todo caso, el asunto está en fase de estudio, así que toca esperar para ver cómo se resuelve al final.

    Aparte de lo dicho hasta ahora, esta la incógnita de la ascensión: ¿cómo les fue posible a estas personas trepar tan alto con esas carencias? ¿A quién le coló el señor Batalla ese título tan burdamente falsificado (burdo 1, burdo 2) para pasar de una categoría que no lo precisaba a otra que sí? ¿Hubo negligencia, incompetencia o complicidad? Habrá que ver. Lo de la señora Ninet tiene otros matices. Entró como laboral, o sea, que no es funcionaria de carrera, y una vez "dentro de la casa" tendría la trayectoria que tuviera, hasta que la colocaron en un sitio para el que no estaba acreditada y todo se vino abajo. Me parece inexplicable que llegara a esa subdirección sin el concurso de otras personas que la encaminaran y la nombraran, así que me temo que en esta película aún faltan personajes, ¿se acabará hablando de prevaricación? Sea lo que sea, todo huele que apesta. Por lo que he leído por ahí, la familia de Carmen Ninet ha estado siempre vinculada al PSOE, algunos hablan incluso de dinastía. Entre sus mayores, están los fundadores del PSOE valenciano y ahora están todos colocaditos y volcaditos en la política, ¡qué casualidad! Y qué casualidad igualmente que ella y su marido (familia también, nótese) hayan coincidido en tener la dicha, cada uno a su manera (tramposa en ambos casos), de ascender en la Administración hasta buenos puestos que les estaban vedados por su carencia de títulos. ¿Estaremos ante un caso de caciquismo político en la Comunidad Valenciana? ¿Será ese caciquismo tan poderoso que tendrá la facultad de colocar en buenos puestos públicos a los hijos de "buenas familias" socialistas por enchufe o por fraude, despreciando los méritos y los requisitos legales? Habrá que verlo. Y otra cosa: ¿será solo en la Comunidad Valenciana?

    Si este asunto se reduce al matrimonio Batalla - Ninet sería un caso deplorable, pero, si es un síntoma de algo más extendido, podría estar avisándonos de la corrosión de la Administración española. Si hemos llegado a esa catástrofe, esta historieta debería preocuparnos mucho más de lo que parece hacerlo.

domingo, 3 de agosto de 2025

El Nacional.cat y la Generalidad

     El Nacional.cat es un periódico digital que nació en 2016 y que sigue una línea independentista. Su fundador es José Antich, un profesional de extensa trayectoria que ha colaborado en medios como EFE, "El Periódico" o "El País" y que fue durante catorce años director de "La Vanguardia". Entre sus secciones se encuentra una titulada En azul, que se dedica a la crónica social. Las cuatro cosas tan aseaditas que llevo dichas son las que ellos declaran de sí mismos, pero callan una crucial: que reciben sustanciales ayudas de la Generalidad. Según El Economista, estas vendrían a representar un tercio de su facturación. En 2021 el gobierno catalán lo regó con 662.242 euros en publicidad y en 2022 lo favoreció con 330.000 en subvenciones puras y duras. 

    Conozco ya desde hace tiempo El Nacional.cat, a través de titulares suyos que he visto en más de una ocasión, la mayoría de los cuales, por no decir todos, se refieren a la familia real. Esos titulares son tan vomitivos en la magnitud de sus mentiras y calumnias, tan espantosos en el odio que rezuman y tan indignantes en la grosería y suciedad de su torpe lenguaje que jamás se me había ocurrido pulsar ni uno solo de ellos, pero hoy, al haber descubierto por casualidad la noticia de que este medio tan patético recibía un decisivo caudal del dinero de todos los españoles a través de las ayudas de la Generalidad, me ha parecido que merecía la pena prestarle alguna atención y entrar en sus páginas. A la luz de lo que he encontrado en ellas, creo necesario hacer una nueva redacción de las primeras líneas de este artículo, más ajustada a la realidad: El Nacional.cat es un panfleto que nació en 2016 y que defiende un separatismo demencial. Su fundador es José Antich, un fanático iluminado, como demuestra él mismo con sus actos y en la semblanza que he enlazado más arriba, que se corona con esta guinda: "Seguiremos dando la batalla, acompañando a todos aquellos que creen que Catalunya no ha llegado a la meta". Otro cruzado de la triste causa de la independencia catalana, un amargado rencoroso más, pero, eso sí, bien subvencionado.

    Por lo que se refiere a En azul, esa supuesta sección de crónica social, está claro que es en realidad el vertedero en el que se amontonan esos viles y repugnantes ataques a la familia real que, sinceramente, yo creo que son la verdadera razón de la existencia de El Nacional.cat: servir de instrumento para la guerra sucia, una guerra en la que se revuelca con fruición el separatismo catalán, que deja en manos de este viscoso enano editorial lo que otros medios en apariencia más serios (si es que hoy en día puede haber algo serio y limpio en la política y la cultura catalanas) desearían vivamente hacer, pero no se atreven. Para que os deis cuenta de lo premeditadamente urdida que está la maquinación, os diré que para cada miembro de la Casa Real hay un índice, os dejo aquí los enlaces a los del rey Felipe VI, la reina Leticia y la princesa Leonor. Quiero advertiros una cosa: esos enlaces os conducirán a los índices mencionados, donde lo primero que os vais a encontrar son los títulos de los artículos; la sola visión de estos os dará idea de las cumbres de indecencia, grosería, ruindad y falta de ética que pisa El Nacional.cat. No hará falta que os diga que no me produce el menor placer la presentación de unos enlaces que conducen a tal zahúrda de abyección periodística, pero he creído necesario hacerlo, porque pienso que debe darse a conocer su existencia. Por si queréis haceros una idea de lo que hay pero a la vez ahorraros el entrar ahí, con el mismo disgusto ya mencionado, os voy a reproducir los titulares de tres de esas "noticias": Leonor ha estado cuatro días sin salir de la mansión con su nuevo ligue 12 años mayor; Leticia recae de sus problemas con la bebida en Mallorca, conducía ebria, iba de lado a lado de la autopista; Felipe VI, refugio en Mallorca lejos de Marivent para ligues y aventuras de cama, el mismo que usaba su padre. Este es el jaez de la mercancía, que transmite una idea muy nítida de la calaña de los mercaderes que trafican con ella; esta es la envilecedora porquería con que los medios del separatismo alimentan a sus huestes, una dieta rica en odio.

    Durante todo el tiempo que he estado tropezando ocasionalmente con esta basura mediática, he supuesto que la Casa Real, sin duda conocedora de ella, habrá llegado a la conclusión de que enredarse en guerras y emprender acciones legales sería más perjudicial que hacer caso omiso del asunto y que por eso lo deja correr, pero, ahora que he entrado en las páginas hediondas de este medio, me hago algunas preguntas: ¿no deberían otras instancias resolver este atropello continuado? ¿no deberían el Gobierno o la Fiscalía hacerse cargo de defender al jefe del Estado y su familia? ¿Tenemos que aguantar tales injurias a las altas instituciones ellos y todos los españoles? ¿Sucede esto en otros países? Por otra parte, yo estaba al tanto del odio irracional que los separatistas profesan a la Corona (como a España en general, esa España de la que ellos forman parte), pero preocupa descubrir que alcanza extremos tan fangosos, pues da la impresión de que esta gente tiene el alma enferma, lo cual es muy poco tranquilizador. No me sorprende en absoluto, sin embargo, que la cínica mano de la Generalidad haya estado detrás de esto, financiando la máquina de sembrar calumnias y conflicto que es El Nacional.cat, pero, en el momento actual, en el que el presidente del Gobierno regional catalán es el socialista Salvador Illa, sería muy pertinente formular esta pregunta: ¿sigue la Generalidad dando dinero a un medio que injuria y calumnia al jefe del Estado y a su familia? Me alegraría saber que no es así, pero, en caso contrario, ¿pretenderá el señor Illa que nos traguemos ese embuste de que él es constitucionalista, y no un separatista más? ¿No se avergonzará de la farsa que representa cuando va a recibir al rey con sus gafitas y su carita de bueno? Y esperando, además, que creamos que por eso es mejor que los cavernícolas que le precedieron. ¡Pero no, qué estoy diciendo! El bueno de Illa es un tío leal y claro, sería incapaz de dar un solo céntimo a un medio como el Nacional.cat.

viernes, 1 de agosto de 2025

Guía urgente de currículos con un ligero olor a podrido

         Desde que el gran estratega político e insuperable ministro Óscar Puente decidiera hará cosa de una semana extender su dedo acusador hacia Noelia Núñez -una joven que empezaba a despuntar en el PP pero que hasta hace dos días era una completa desconocida- desvelando que había presentado un currículum falso, se ha desencadenado una epidemia de falsificadores desenmascarados en la que es necesario poner orden cuanto antes si queremos aclararnos, cosa a la que el guachimán, guiado por su proverbial sentido cívico, procede en este mismo instante. 

       -Begoña Gómez: Vinculada al PSOE por razones familiares (no sé si estará afiliada), de sus pasos en la tierra se ha hablado mucho últimamente. Lo referido a sus irregularidades curriculares se sabe al menos desde 2020, año en que ya traté el asunto aquí

    -Bernat Soria. Este señor, que fue ministro con el PSOE y tiene un nada despreciable currículum académico, científico y político ¡también se permitió falsificaciones en su perfil! Solo la vanidad puede explicar este caso. 

     -Carles Puigdemont. Cuando este canalla cometió la falsificación de su currículum era de CiU. Presumió de una licenciatura en Periodismo que no tenía, y acabo de encontrar el dato aquí, cuando buscaba otras cosas. Al Honorable (😂😂😂😂) le ha cabreado muchísimo que el periodista  Antonio Naranjo desenterrase la golfada y le ha mandado un burofax, pero le ha salido el tiro por la culata. Leedlo, tiene gracia. 

    -Carmen Montón (PSOE). Fue ministra de Sanidad y se vio obligada a dimitir por un máster plagado de Irregularidades. Más información, aquí.

    -Carmen Ninet (PSOE). El caso de esta señora, esposa de José María Ángel Batalla, es asombroso y puede ser muy grave, como el de su marido. Lleva 14 años ejerciendo como subdirectora de un museo de no-sé-qué y para ese cargo sería obligatorio estar en posesión de una licenciatura que ella no tiene. Los ingresos que durante ese tiempo le ha reportado ascienden a unos nada despreciables 720.000 euros, como puede verse aquí, así que tendremos que estar muy atentos a cómo se califica y se resuelve su aventura. ¿Cómo consiguió colarse hasta un puesto tan fuera de su alcance? ¿Tuvo ayuda de otros? 

    -Cristina Cifuentes (PP). Esto fue una auténtica orgía de despropósitos. Cifuentes decía tener un máster en Derecho Autonómico y Local, que ciertas investigaciones periodísticas demostraron que era un mero papel. La expresidenta madrileña fue liando las cosas y estuvo a punto de ser condenada por falsedad documental, de lo que no se libraron una profesora y una asesora de su confianza. Un asunto muy turbio en el que participaron personajes muy siniestros y que no deja muy bien a la Universidad Rey Juan Carlos. El resumen que os he enlazado es muy preciso; a mi modo de ver, las dos condenadas fueron unos pobres chivos expiatorios.

    -Cristina Narbona (PSOE). Se hacía pasar por doctora en Económicas, pero era solo licenciada. Más información, aquí.

 -Ignacio Higuero. Fue miembro de Vox, pero abandonó esta formación para continuar ejerciendo como consejero de Gestión Rural en el gobierno extremeño que dirige María Guardiola (PP). Según unos ha dimitido y según otros ha sido cesado, en cualquier caso, por este motivo: destaparse que no podía tener la licenciatura en Marketing que aparecía en su currículum y que él afirma que la obtuvo en 1993, pues ese título se creó en 2013. Más información: aquí. 

    -José Blanco (PSOE). Solo aprobó primero de Derecho, pero en su currículum ponía que era licenciado. El pobre hombre, en su proverbial inocencia, se confundió. Más información: aquí. 

    -José Franco (PSOE). Un error de cálculo le llevó a atribuirse una licenciatura en Matemáticas que no poseía. Más información: aquí.

       -José María Ángel Batalla (PSOE). Al igual que su cónyuge, el ya dimitido Alto (😂😂) Comisionado para la Reconstrucción tras la Dana -una tarea retribuida con 120.000 euracos anuales- y Presidente del PSPV, ha jugado muy fuerte y lo lógico sería que lo pagase muy caro, pero ya sabemos lo barata que sale la corrupción en este país. Como parece fuera de toda duda, este señor va por el mundo con un título de licenciado falso, como puede verse aquí, aunque os recomiendo que busquéis más, porque el asunto es complejo, pues, además del mero hecho de la falsificación -que ya por sí sola constituye un delito- hay ahora que resolver otros extremos importantes, sobre todo, estos dos: para qué finalidades administrativas y laborales se usó ese título y si hay alguien más implicado en estos fraudes.

    -Juan Manuel Moreno Bonilla (PP). De licenciado a graduado, una trayectoria bastante esperpéntica que podéis ver aquí en versión breve y aquí en versión detallada.

    -Luis Roldán (PSOE). Uno de los mayores y más afamados corruptos de la política española aseguraba ser ingeniero y economista cuando solo tenía el título de bachillerato. Más información, aquí.

    -Manuel Borrego (PSOE). Al secretario de organización del PSOE de Extremadura parece ser que le faltan doce créditos para completar el título en Ingeniería Química que asegura poseer, pero él ha alegado que sí lo tiene, porque la Universidad de Extremadura se lo concedió por medio de un procedimiento que existe (y así es) en aquella docta institución, la compensación curricular (1). ¿Una universidad compensatoria? Juzguen ustedes mismos. Más información, aquí

  -Noelia Núñez (PP). Aseguraba estar en posesión de un grado de Derecho y Ciencias Jurídicas que no tiene. Ha dimitido de sus cargos en el partido y ha renunciado a su acta de diputada. Más información, aquí. 

    -Óscar Puente (PSOE). El hombre que desenmascaró a Noelia llama máster a un curso que da el PSOE a sus afiliados. Más información, aquí.

    -Pablo Casado (PP). Uno de los historiales más disparatados de la política española, ahí es nada. Aseguraba tener más títulos que la cartelera, pero ni uno solo estaba completamente sano, como mínimo. En las últimas líneas de este artículo se resume muy bien su ensalada de despropósitos curriculares. Llamada a la reflexión: este personaje hubiera podido ser presidente del Gobierno de haberle fallado los cálculos a Sánchez: ¿qué hemos hecho los españoles?

    -Pachi López (PSOE). ¿Cuánto tiempo "estudió Ingeniería Industrial" este personaje? ¿Tres cursos? ¿Un curso? ¿Tres meses? ¿Cinco minutos? A responder a esta pregunta se dedica este artículo, del que puede concluirse que el señor López ha jugado muy turbiamente con la ambigüedad (lo cual no es ni de lejos el mayor de sus pecados) para aparentar que posee una ingeniería que no tiene. 

    -Pedro Sánchez (PSOE). Aquí se habla de un falso máster en Liderazgo Público de este nefasto personaje y aquí de su tesis doctoral plagiada, y también aquí y aquí. Esto era muy conocido, sorprende que Óscar Puente se haya lanzado a abrir el melón de los méritos falsos.

    -Pilar Bernabé (PSOE). La actual delegada del Gobierno en Valencia tiene una licenciatura en Filología Hispánica y otra en Comunicación Audiovisual, pero, aunque ella lo niega, parece ser que no ha completado ninguna de las dos carreras. Más información, aquí

    -Xavier García Albiol (PP). Recién sacadito del horno. Según esta noticia, acaba de haberse visto obligdo a rebajar el nivel de los estudios de Derecho que figuraban en su currículum.

    -Yolanda Díaz (Sumar). Los másteres de esta señora son de tan mala calidad que encogen al primer lavado, como puede verse aquí: pasan de másteres a cursos. También presume de una galería de cursos que asusta, pero yo no daría medio euro por uno solo de ellos, por todo lo que se cuenta aquí.

    Como habréis visto con lo que pongo sobre García Albiol, la tormenta desatada por Óscar Puente lleva camino de convertirse en un temporal apocalíptico: ¿cuántos de nuestros políticos habrán mentido ya en el simple escalón del currículum con que se autorretratan? ¿Cuántos embusteros más van a ir saliendo a cada minuto que pase? La cosa tiene un fondo muy sombrío, porque la mentira no es buena para ninguna actividad humana, así que la gestión de lo público tampoco podía escapar a esta ley general. ¿Y qué podemos esperar de unos gobernantes que mienten ya desde antes de empezar a ejercer? La respuesta es pesimista: quienes así actúan no pueden traer buenas intenciones. A la política española le hace falta una limpieza en profundidad. Hacen falta leyes que nos protejan de esto, normas que adviertan a los arribistas de que estas conductas, en caso de detectarse, los expulsarán del tablero. ¿Haremos una cosa así? No lo sé, porque tengo muy claro que este deplorable jolgorio lo podrían haber evitado fácilmente los propios partidos desde sus estatutos, pero lo que han hecho ha sido fomentarlo. No puedo cerrar este artículo si dedicar un caluroso elogio a Óscar Puente: abrió la cacería para cargarse a una insignificante criatura del PP, y es verdad que abatió a la pieza, y que ha puesto en evidencia a algunos otros rivales, pero, si miramos esta relación, el mayor afectado ha sido su propio partido, con él mismo incluido entre los transgresores. ¡Genio! También ha conseguido focalizar un problema serio de la moralidad general de nuestros políticos, pero, obviamente, esto lo ha hecho sin querer. 


1. A las 01:24 horas de hoy, 2 de agosto de 2025, encuentro esta información, que haría muy dudoso que el señor Borrego, nacido en 1980, hubiese podido servirse de la compensación curricular, un recurso que se puso en marcha en su universidad en 2020, con lo que caerían por tierra sus explicaciones. Además, se cuestionan también otros méritos que figuran en su currículum.


    

miércoles, 23 de julio de 2025

Manifiesto a favor de Pedro Sánchez en el que se echa de menos la firma de Pedro Sánchez

     ¿Sabían ustedes que el narcotráfico es una actividad muy honorable y benéfica que crea riqueza, da de comer a muchas familias y saca del paro a miles de personas? ¿Sabían que es una industria que vela por los más desfavorecidos, pues cualquier tuercebotas puede levantarse dos mil euros o más en solo una noche por vigilar si se acerca la Guardia Civil? ¿Sabían que, por todo lo anterior, los capos de la droga son unos virtuosos filántropos que merecen el respeto y la veneración, tal que la Virgen india de Cafrune y Marito? No estoy bromeando: estas opiniones las sostienen con firmeza quienes sacan beneficio de esa actividad criminal, se lo he visto y oído decir a unos cuantos, incluso ante las cámaras televisivas y a cara descubierta. Cuesta poco imaginar, en consecuencia, las alabanzas a esta vil actividad que iluminarían un manifiesto firmado por gente de este tipo, ahora bien, como diría cierto personaje un tanto cínico de El puente de los espías, ¿serviría de algo? NO. ¿Rasparía un microgramo de roña a la merecida montaña de desprestigio que sepulta al narcotráfico y a los narcos? NO. Como cualquiera sabe muy bien, los elogios de tu papá y tu mamá, o de tus amiguetes, o de los que reciben tus favores, no tienen el menor efecto a la hora de acreditar tu valía, pues, mal que les pese a ciertos canallas, somos hijos de nuestras obras, y no de la siembra de mentiras, espejismos o interesadas lisonjas, así que estos procedimientos son inútiles y de vuelo gallnáceo.

    Sorprende que una verdad tan elemental y corroborada por la experiencia la hayan ignorado los firmantes del manifiesto a favor de Pedro Sánchez que salió anteayer a la luz pública, pues todos son personas de talento y que han alcanzado altos logros en su actividades profesionales o políticas, por lo cual uno no se explica como, al mirarse a las caras o leer el listado que ellos mismos componían, no se dieron cuenta de que ese truño dedicado a la ultradefensa del impresentable y ya indefendible Pedro Sánchez no iba a colar, por la sencilla razón de que son todos -salvo algún que otro despistado: todo el mundo se pregunta qué hace ahí Juan Manuel Serrat (2)- amigos, admiradores incondicionales, camaradas, compañeros de trinchera o favorecidos del reivindicado: ¿qué otra cosa iban a hacer que echarle alabanzas, flores y un angustiado capote? Viniendo de ellos, eso no vale para nada. Si hubieran publicado un alegato, aún habría tenido algún sentido, pero de ningún modo tratándose de un manifiesto, un documento que por definición está destinado a buscar adhesiones.

    Pero aún hay otro rasgo más demoledor: la identidad de los firmantes, en la inmensa mayoría de los cuales resulta un tanto vergonzoso que se descuelguen rubricando papelitos en favor de Sánchez. ¿Cómo no van a adorarle Magdalena Álvarez y Manuel Chavez, a los que ha salvado -por ahora y por Pumpido- de pagar por el brutal latrocinio de los ERE? ¿Qué otra cosa que apoyo al infame Pedro Sánchez puede esperarse de los socialistas Joan Clos, Almudena Asenjo, Manuel Escudero o Sebastián Pacheco, los tres últimos, directivos de fundaciones del PSOE de esas que le suministran munición ideológica? ¿O de los ministros zapateristas Mercedes Cabrera, Elena Espinosa, Jesús Caldera, López Aguilar, José Montilla -ese charnego ideal-, Miguel Sebastián, Leire Pajín o Fernández Bermejo (el de las cacerías), siendo como es el sanchismo la prolongación natural del infecto zapaterismo? ¿O de Julián Campo, Manuel Castells, Carmen Montón (miembro, como el propio Sánchez, del Club de los Doctores Fraudulentos), Joan Subirats o Alberto Garzón, todos ellos ministros del sanchismo? ¿O de los veteranos cruzados Pedro y Agustín Almodóvar, Carlos Bardem, Ana Belén, Víctor Manuel, el lírico García Montero (verdadero Fideo de Mileto del sanchismo), Loles León, Jesús Maraña, Miguel Ríos, Marta Sanz, Rosa Villacastín o Manuel Rivas? Y no citaré más, ya con estos hay bastante. Insisto: ¿para qué sirve un manifiesto a favor de Pedro Sánchez con estos firmantes? Para que la gente se muera de risa, ya no convencen a nadie. Muy mal se las debe de estar viendo hoy el sanchismo para tener que echar mano de estas mojigangas.

    Resulta inexcusable hacer alguna referencia al contenido del manifiesto, que es tan pobre estilística y conceptualmente como aquel de los 26 infernales años del que me ocupé en su momento, pero esta vez no pienso entrar tan a fondo. Consiste en un mísero y miserable ataque a quienes osan criticar al podrido Gobierno actual, investigar su voluminosa corrupción o pedir cuentas por ella. A la vez, lo defiende -como era esperable en el sanchismo- con mentiras, particularmente esa de que atravesamos gracias a él un dorado esplendor económico (1), cuando es justamente todo lo contrario, mírense por ejemplo el paro (del que se empieza por manipular las cifras), el embolado de la vivienda o el pésimo estado de las infraestructuras de comunicación. Pero lo verdaderamente grave de este documento es que exhibe sin pudor una feroz inclinación antidemocrática, que se sustancia en la condena del menor movimiento o pensamiento contrario a la acción del Gobierno; los abajofirmantes parecen estar muy convencidos de que el único papel posible para quienes no sean de su cuerda es permanecer quietecitos y calladitos con absoluta sumisión contemplando como Pedro gobierna, hace y deshace, y dejándole machacarnos. Toda otra postura representaría atacar a la democracia e intentar destruirla. Si esto no es totalitaristmo, que venga Dios y lo vea: ante el divino Pedro Sánchez, nada de oposición, nada de crítica, nada de alternancia. Para quienes queráis un análisis más pormenorizado del manifiesto, Carlos Rodríguez Estacio ha publicado una réplica (pulse aquí) en "The Objective", con la que estoy de acuerdo en todo, incluida la indignación que transpira, muy comprensible, dado que la ocurrencia de esos cien firmantes es una verdadera coz, un ataque zafio a todo aquel que pestañee, y lleva ímplicito además un prepotente desprecio a los principios democráticos.  


1. De todas formas, aunque fuera verdad ese invento de la prosperidad económica que tanto les gusta manejar a los sanchistas, tampoco serviría en absoluto para justificar ni perdonar los incontables abusos de Sánchez. Como algunos no lo ven así, suelo plantearles un símil con la película de 2011 No tengas miedo, que cuenta la historia de una joven veinteañera a la que su padre ha estado violando desde que tenía más o menos diez años. Durante todo ese tiempo, el padre le ha dado una vida muy desahogada e incluso vemos como de mayor le ha facilitado un empleo en su clínica dental, que hay que suponer bien remunerado. ¿Justificaría eso las horrendas cosillas que le hace? De ningún modo, como tampoco la buena marcha económica haría admisibles los atropellos de los gobiernos corruptos.

2. ¡Qué despiste el mío! Después de publicar esta entrada, recuerdo que Sánchez se lo había "ganao" en diciembre de 2022, cuando acudió a su concierto de despedida, por supuesto, con Begoña y en el Falcon.

domingo, 13 de julio de 2025

Comparsas de la corrupción

      El pasado nueve de julio, seguí en directo las dos o tres primeras horas del pleno del Congreso que se suponía dedicado a que Pedro Sánchez explicara la corrupción de su Gobierno y su partido. La incógnita (😂😂😂) era si sus socios en la llamada coalición Frankenstein iban o no a retirarle su apoyo por el apestoso asunto que se resume en un nombre propio: Santos Cerdán, con sus mordidas, trapicheos, concesiones amañadas, amistades patibularias y demás abusos y latrocinios. No me siento en condiciones de valorar hasta qué punto esas formaciones se escandalizan por otros asuntillos, tales como Koldo/Ábalos, Armengol, Torres, Berni, García Ortiz, Begoña, David Sánchez, Gallardo, Leire, Delcy, Marco Sanjuán, Rafael Pérez, Pardo de Vera, Herreros, Anabel Mateos, Plus Ultra, ERE andaluces, amnistía y un etcétera más bien largo, aunque doy por supuesto que todos, incluido el de Cerdán, se la bufarán les parecerán inocuos, dados los veredictos absolutorios para el inmaculado Pedro Sánchez que expresaron en ese pleno o posteriormente, de los que paso a presentar un breve compendio.

    1.- PNV. Su portavoz, Maribel Vaquero, cuya comparecencia satiriza Jon Juaristi aquí, concluyó que a Pedro Sánchez solo le salva de la desnudez completa que supondría la condena fulminante del PNV una hoja de parra que le tapa los genitales, pero, como algún vientecillo la haga caer, ¡se va a enterar de quién es el PNV condenando inmoralidades y abyecciones! De momento, que siga. ¿Qué otra postura se podría esperar del nucífago PNV, un partido que lleva décadas momificado en la gestión de chantajes? Y, para colmo, ahora están muy nerviosos por esa relación que parece existir entre sus chanchullos y los del mismísimo Santos Cerdán. Esa leyenda de que eran limpios y serios pasó a la historia hace tiempo, pero ellos siguen empeñados en imaginar que la gente aún se la cree.

    2.- Junts. Mirian Nogueras aprovechó su tiempo para apalear a su aborrecida España, cosa que hizo en catalán, sirviéndose de esa aberración de meter en el Parlamento de todos los españoles ciertas lenguas que solo hablan unos cuantos, implantada por Pedro Sánchez. Esta también le perdonó la vida, pero que nadie vaya a creer que se olvida de todos los agravios que le ha hecho al separatismo catalán: esto mismo de las lenguas en el Congreso, los indultos, la amnistía, mandar a Cerdán (¿y a Zapatero?) a arrodillarse ante Puigdemont, los pactos con Illa, permitir los abusos con el catalán, las cesiones fiscales... ¡Heridas así tardan en cicatrizar!

    3.- Sumar. O, para ser más exactos, Yolanda Díaz. Esta señora, con su absoluta carencia de sentido del ridículo, se ha propuesto matarnos de risa. Después del juguete cómico que nos regaló recientemente en el programa de Alsina, subió a la tribuna en el pleno dedicado a la corrupción del PSOE... ¡para lanzarse a la yugular del PP! Y también, para decirle a Sánchez que ella cree que es honesto (😂😂😂😂). Fue inenarrable, tienen que verlo completo, ¡qué despropósito, qué desmelene para absolver al canalla que tiene en su órbita esas cosillas del primer párrafo de este artículo! Lo defenderá hasta el fin, porque tiene pavor a ser desalojada de la vidorra que se está pegando gracias a él.

    4.- Bildu y Podemos. Dejo por descontado que TAMBIÉN encontraron poderosas razones para seguir manteniendo a Sánchez, pero los traigo aquí y juntitos por otra razón. El pasado día 11, publicaba "El Mundo" una noticia que daba cuenta de que la Audiencia Nacional va a procesar al asesino conocido como Josu Ternera. En dicha noticia, se incluía un recuadro referido a una reunión que iban a mantener Jone Belarra y Arnaldo Otegui, "para analizar la posibilidad de impulsar un proyecto democrático popular y plurinacional frente al bloque de la derecha y de la extrema derecha que combata de manera estructural la corrupción". Una radical incendiaria como Ione Belarra, representante de Podemos, una formación que tiene mucha porquería interna y que nos ha dejado discordia, apología de la violencia, escraches, okupas y leyes aberrantes como la de sí es sí o la trans, y un exterrorista con una biografía siniestra y cargada de odio y suciedad, pretenden hacernos creer que ellos son purísimos y están en condiciones de asociarse para combatir la corrupción, cuando para lo único que están capacitados es para destruir, véanse sus hazañas y sus entornos políticos. Este encuentro se produce en el marco de unos contactos que Otegui está celebrando con las formaciones que "han apoyado de una u otra manera el bloque de investidura". Estos son los amigos de Sánchez, a estos ha hecho sus colaboradores para gobernar España. Esta atrocidad es tan grave como las turbiedades de Cerdán, o tal vez más.

    5.- ERC. Dejo para el final este partido porque sus posturas han salido de la boca hedionda de uno de los personajes más dañinos de la deplorable etapa histórica que atravesamos: Gabriel Rufián.  Hace cinco años, ya le dediqué aquí un artículo en el que mostraba mi desaliento por el hecho de que un personaje como este ocupara un escaño en nuestra cámara baja: por fuerza, algo tenía que ir mal en nuestro país si esto era posible. Después de verlo el pasado día 9, me ratifico en ello y voy más lejos, porque ahora, con más conocimiento de cómo es él, del sanchismo, de Frankenstein y del abismo al que nos están arrastrando, creo que es catastrófico que un ejemplo de cinismo, irresponsabilidad, fanatismo, iniquidad e inmoralidad como este sujeto no solo esté en nuestro parlamento, sino que además sea un referente para los planes que vaya a poner en práctica la delincuencial alianza en cuyas manos se agita hoy España. Con esta gente y con estos planes, con ideólogos sin escrúpulos como Gabriel Rufián, vamos derechos al desastre en el que, por otra parte y mejor que dejemos de engañarnos, tenemos ya metido un pie y medio. Rufián sigue siendo el mismo patán provocador y narcisista de 2020; su trato al adversario es tan grosero como entonces, o quizás más, por eso, al igual que en aquella ocasión, voy a enlazar su intervención completa, porque para entender bien lo que este energúmeno representa no basta con saber lo que dice, sino que es necesario también contemplar sus modales:

LAS LECCIONES DE MORAL DE UN VIVIDOR EMPEDERNIDO

    Y, a última hora, ¿qué es lo que dice? Es muy sencillo: aparte de cocear e insultar a sus enemigos, le da a Sánchez este consejo: que abandone ya el "y tú más", lo que es tanto como decirle que se deje de complejos y garambainas, que eso de la corrupción son minucias que en nada empañan la alta misión que está liderando, o sea, los excelentes logros sociales que está alcanzando el Gobierno ayudado por Frankenstein (😂😂😂😂), así que lo que tiene que hacer es tirar p'alante haciendo oídos sordos y sin dejarse confundir. En resumen: que la corrupción ni importa ni exige explicaciones, porque, si lo hace Frankenstein, todo está permitido.

    Este es, en suma, el mensaje de mayor alcance que nos dejó el pleno del día 9 y no hará falta decir que conduce al pesimismo, o quizás incluso a la consternación. Para la alianza de bandas deletéreas que nos tiraniza, los límites de la moralidad, la decencia, las leyes o el marco democrático carecen de valor y lo único que realmente importa es la consecución de sus planes políticos, por injustos o disparatados que sean, o de sus intereses grupales o personales. Pongo el foco sobre estos últimos y vuelvo al inefable Gabriel Rufián: ni él mismo se traga toda esa retórica pringosa que se gasta sobre los avances sociales, y no digamos ya su putrefacta épica separatista, pues ambas son desmentidas de forma radical por los diez añitos que lleva en Madrid pegándose la gran vida con sus suculentos ingresos de diputado del odioso parlamento español, obtenidos por la extenuante tarea de acudir a los plenos a provocar, insultar a quien le pete y ultrajar a España. Y ya hemos hablado de la no menos inefable Yoli. ¿Y alguien cree que los demás revolucionarios que están despedazando el país y desmantelando la democracia se guían por otras pautas? ¿Sí? Díganme uno que no sea un cínico, un frívolo vividor. ¿Sánchez y su Falcon? ¿Ábalos y sus sobrinas? ¿Cerdán y sus chanchullos? ¿Otegui y sus proyectos democráticos (= 💣)? ¿Miriam Nogueras? ¿Urtasun? ¿Pilar Alegría? ¿La Belarra? ¿El por fortuna emigrado Aitor Esteban y su soberbia? No se salva ni uno. Haríamos bien en ir entendiendo que Sánchez es malo, pero el sanchismo, esa vasta comunidad parasitaria que ha segregado en torno a él, es mucho peor, porque le sobrevivirá, es muy fuerte y no va a soltar por las buenas todo lo que ha rapiñado.