Libros que he publicado

-2028. ¿Cómo será la Tercera República? -LA ESCUELA INSUSTANCIAL. Sobre la urgente necesidad de derogar la LOMLOE. -EL CAZADOR EMBOSCADO. Novela. ¿Es posible reinsertar a un violador asesino? -EL VIENTO DEL OLVIDO. Una historia real sobre dos asesinados en la retaguardia republicana. -JUNTA FINAL. Un relato breve que disecciona el mercadeo de las juntas de evaluación (ACCESO GRATUITO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA). -CRÓNICAS DE LAS TINIEBLAS. Tres novelas breves de terror. -LO QUE ESTAMOS CONSTRUYENDO. Conflictividad, vaciado de contenidos y otros males de la enseñanza actual. -EL MOLINO DE LA BARBOLLA. Novela juvenil. Una historia de terror en un marco rural. -LA REPÚBLICA MEJOR. Para que no olvidemos a los cientos de jóvenes a los que destrozó la mili. -EL ÁNGULO OSCURO. Novela juvenil. Dos chicos investigan la muerte de una compañera de instituto. PULSANDO LAS CUBIERTAS (en la columna de la derecha), se accede a información más amplia. Si os interesan, mandadme un correo a esta dirección:
repmejor@gmail.com

Tenéis información de los precios aquí:

martes, 22 de septiembre de 2020

Hit

    Tenía curiosidad por ver el primer capítulo de Hit, la serie que acaba de estrenarse en TV-1, porque se presentaba como una incursión en los problemas de la enseñanza, pero ya desde este momento señalo que no me parece así: en el episodio que he visto, ocurren cosas que pasan en los centros educativos (algunas, y otras que no), pero, desde luego, ni nuestros centros ni nuestra enseñanza tienen nada que ver con la historia que ahí se contaba. Cierto que los hechos de Hit se desarrollan en un instituto, pero tan peculiar que no creo que haya ninguno así, porque el comportamiento de sus alumnos y las cosas que ocurren son excesivos para un centro normal, pero, por el contrario, esos chicos, que hacen cosas de delincuentes que deberían estar en centros de reforma, no son ni de lejos tan cínicos, malvados y peligrosos como son los verdaderos jóvenes de centros de reforma. Ni tanto ni tan calvo, vamos. Así pues, pienso que quien se asome a esta serie debería hacerlo teniendo claro que va a presenciar una ficción, un espectáculo que podrá gustarle o no, pero no una dramatización de algo parecido a nuestra realidad escolar. 

     Esto no lo digo como condena, sino para aclarar la confusión que podrían generar la publicidad de la serie o algunas cosas que se han dicho en el debate posterior, en el cual, por cierto, también se ha señalado lo que yo digo: tanto Daniel Grao (el actor protagonista) como Carolina Fernández del Pino (vicepresidenta de ANPE), han dicho que en un solo capítulo se han visto juntas cosas que pasan en muchos centros y en mucho tiempo. La señora Del Pino ha subrayado además lo referido a la violencia, que en la serie ha sido abundante, pero que en la realidad de nuestra enseñanza, aunque existe, ni es extrema ni se produce en exceso. Estoy totalmente de acuerdo, con lo que tendremos que desechar el realismo en una serie que empieza con la quema de cuatro coches en el patio del instituto: esto, por fortuna, no es Medellín, ni Kabul. 

    Es muy lícito que una serie busque elementos espectaculares con los que entretener y atraer a sus espectadores, y la realidad de nuestras aulas no da para eso, aun teniendo algunos importantes problemas, que los tiene. Se acabaría aburriendo a la audiencia, y las series no están para eso. La única película que he visto que retrata una realidad auténtica de las aulas sin aderezos dramáticos, espectaculares o morbosos para hacerla más atractiva es La clase, de François Bégaudeau. Dicho esto, creo que a los productores de Hit les convendría descargarse de pretensiones, porque su serie no va a aportar claves ni soluciones para los problemas de la enseñanza, pero parece que ellos creen o quieren hacer creer que sí, como podría desprenderse de esta frase pronunciada en el debate: "Hacía falta una serie que nos abriera los ojos". Ni Hit es esa serie, ni esa es función de las series, por no hablar de que, sobre los problemas de la enseñanza, es muchísima la gente que tiene ya los ojos bien abiertos. Más aún: se nos ha desvelado que Hugo Ibarra Toledo (o sea, HIT), el profesor protagonista de la serie, en algún momento va a usar un recurso tan rompedor como llevar a actores porno a que hablen con sus alumnos: cuidado con los experimentos en el ámbito educativo: si va a ser esa la apertura de ojos que piensa llevar a cabo Hit, mal asunto.

     Es innegable la buena intención de los productores de Hit, pero no tengo más remedio que terminar mencionando algo que desapruebo y me hace ponerme en guardia. En el debate posterior, había varios grados de participación de invitados y uno de ellos era la telemática. A través de esta vía, iba a intervenir David Jurado. Para quien no lo recuerde, este profesor fue el que detuvo o contuvo a Max Porta, el alumno de un instituto de Barcelona que el 20 de abril de 2015 asesinó al profesor Abel Martínez Oliva. Ha sido presentado por una colaboradora del programa como "el único que fue capaz de detener" al autor del crimen. En aquella ocasión, escribí un artículo titulado El auténtico héroe, que para mí no fue otro que el fallecido Abel Martínez, y lo hice entre otras cosas porque empezaba a verse ya el maltrato a su figura y que les estaban colgando a otros medallas que a lo mejor no merecían. Así ocurrió concretamente con el señor Jurado, a quien no niego méritos, pero que quizás no fue tan heroico. Otra cosa que no me gustó de él fue que fuese uno más de los que se montaron al carro de la compasión excesiva con alguien que había asesinado a una persona y no mató a más porque le fallaron los planes, por mucho que se tratase de un niño. Hablé de todo eso aquí. Con toda sinceridad, no creo que el señor Jurado merezca estar en lo alto de ningún pedestal, así que, si Hit va a servir para esto (que espero que no), flaco favor va a hacerle a la enseñanza.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario