domingo, 1 de junio de 2025

¿Cocinando falsas conspiraciones para justificar un golpe al orden constitucional?

     Cuando tuvimos claro que Pedro Sánchez carecía de límites y de escrúpulos y que la estrategia de su desparramada carrera de abusos, atropellos y desafueros consistía en cometer hoy uno que dejase pequeño al de ayer y que fuese a la vez un juego de niños comparado con el que  perpetraría mañana, empezamos a compararlo con el Jean-Paul Belmondo de Al final de la escapada, aquel inmoral descerebrado que no tiene ni la capacidad ni la voluntad de frenar sus crímenes y acaba estrellándose, víctima de la espiral cada vez más acelerada que él mismo ha creado. Parece que para Sánchez ese momento ha llegado ya, dada la abundancia, la pestilencia y la envergadura de las hortalizas que abarrotan el berenjenal en que está metido. Ahora bien, a la vista de cómo ha demostrado ser este personaje, los que no creemos en él  también hemos sospechado siempre que no abandonaría el poder por las buenas y que, cuando se viese ante esa tesitura, sería capaz de recurrir a cualquier vileza para conservarlo. En los últimos días están saliendo a la luz algunas noticias muy alarmantes que, por desgracia, dan la razón a esos temores.

    A principios de esta semana, llegó a conocimiento de la opinión pública el escabroso asunto de la conspiración que una tal Leire Díez, militante del PSOE muy bien relacionada con lo más granado del partido y con un historial que demuestra que tiene no poca importancia dentro de él (1), estaba tramando con un puñado de siniestros colaboradores, conspiración que pretendía sacar información comprometida contra el teniente coronel Antonio Balas, mando de la UCO, y el fiscal anticorrupción José Grinda. Merece la pena, si queréis revisar la información sobre el asunto, que oigáis también los elocuentes audios, que son de escasa duración, pero retratan muy bien lo que se cocía y a los cocineros, en especial, a la señora Díez (2). Lo que se pretendía, en suma, era quitar de en medio por procedimientos sucios a dos personas clave en las investigaciones de los casos que más inquietan al PSOE: Koldo, David Sánchez, Begoña..., con el fin de torpedearlas. Pura metodología mafiosa.

    Que la UCO es la gran jaqueca de Sánchez, el PSOE y Frankenstein 2 lo demuestra el segundo asunto inquietante de estos días (dadas las mañas del sanchismo, mañana podría salir un tercero), que es de hace apenas unas horas (3). Todo parte de una noticia propagada por "El Plural", en la cual este medio divulga una conversación mantenida en 2021 entre Juan Vicente Bonilla, capitán de la Guardia Civil hoy al servicio de la Comunidad de Madrid, y el empresario José Luis Caramés. De ella puede deducirse que están tramando poner una bomba lapa en los bajos del coche de Pedro Sánchez. Esto, naturalmente, es una enormidad, un intento de atentado terrorista, pero sucede que... la conversación está manipulada. Como se demuestra en la explicación del asunto que facilita "The Objective", que también poseía ese documento, los responsables de "El Plural", de manera vergonzosa y ladina, han suprimido en él unas pocas líneas, con el resultado de que lo que en realidad era una broma de Bonilla ironizando con que él mismo podía ser el destinatario de la bomba, queda convertido en una conspiración magnicida. A la hora en que escribo estas líneas, de quienes se subieron al carro de este bochornoso montaje, solo se ha apeado La Sexta, pero ni "El Plural" ni RTVE ni los ministros María Jesús Montero, Pilar Alegría y Óscar López lo han hecho. Lo último que he visto es una noticia de "El Plural" que da cuenta de la exigencia del PSOE de que Ayuso cese a Bonilla. Ayuso: no podía faltar el ataque indecente contra esta persona, a la que el sanchismo está sometiendo a un acoso que los retrata como hienas repugnantes.

    Estas vomitivas campañas del sanchismo y sus sicarios tienen un nombre: GUERRA SUCIA. Esto es gravísimo, no es ninguna broma; el PSOE se ha internado ya en el terreno del ataque a degüello y sin cuartel, con lo que demuestra lo que algunos sospechábamos: que Pedro Sánchez sería capaz de llegar a los peores extremos con tal de apalancarse en el poder.

    Las implicaciones son muy serias y la más grave es esta: que, si se les pone por delante el sistema constitucional, se lo cargarán sin contemplaciones.  Las evidencias que están dejando son irrefutables y, al fin y al cabo, no debería sorprendernos en un PSOE con estos precedentes: el proclamado republicanismo de Zapatero, un personaje que puso en marcha la rebelión del prusés con su insensato estatuto para Cataluña y que hoy manda mucho en el partido; la amnistía a los golpistas del prusés y su complicidad con ellos; las ocho naciones que según el PSC y Miquel Iceta (uno de los amigos de Leire Díez, por cierto) componen España o eso que sostiene Pedro Sánchez de que España es una nación de naciones. El PSOE lleva ya bastantes años aventando unas inclinaciones republicanas y fragmentaristas muy en la línea de ese separatismo con el que tan bien se entiende. Un dato chusco como guinda: Aina Calvo, la recién ascendida nada menos que a secretaria de Estado de Seguridad, promovió en 2014, desde el PSOE de Baleares, un referéndum para proclamar la IIIª República (4).

    No son bromas, insisto. El sanchismo lleva siete años pisoteando límites, leyes y a la propia nación. ¿Qué más tiene que hacer para que le paremos los pies?


1. Fue concejal en Vega de Pas entre 2011 y 2015 y tuvo un alto cargo en Correos entre 2021 y 2023, bajo la protección y las órdenes nada menos que de Juan Manuel Serrano.

2.- Esta es la narración de "The Objective", que incluye los audios. Os dejo también la de "Público".

3.- Nuevamente es el relato de "The Objective" el más afinado.

4.- Republicanistas de izquierdas, separatistas y PSOE son un explosivo batiburrillo contra la nación española y la democracia. En mi novela 2028 trazo una parodia de lo que sería esa Tercera República, y me sale una república plurinacional, bananera y esperpéntica. El punto de partida del que nace es, precisamente, una revolución promovida por un gobernante corrupto que se niega a abandonar el poder. 

10 comentarios:

  1. Es usted un ingenuo, Sánchez es categoría, no anécdota. Lo mismo que la C78 y la PSOE respecto a la vida civil en lo que, por si causa, queda de España

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  2. No te entiendo muy bien, pero, en todo caso, yo a Sánchez lo he calificado de canalla, de sátrapa, de traidor, de megalómano, de soberbio, de enemigo de la democracia y de la nación, de mentiroso patológico..., pero nunca de categoría ni de anécdota. Son cosas que ni me he planteado, porque lo tremendamente malvado y dañino que es lo es tanto si es categórico como si es anecdótico, así que eso son cosas secundarias.

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  3. https://www.vozpopuli.com/opinion/el-gran-apagon.html

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  4. Yo ya llevo mucho tiempo diciendo que no basta con echar a Sánchez: https://papabloblog.blogspot.com/2024/03/derogar-el-sanchismo-demoler.html. Voy más lejos: desde 2010 o así (cuando los rruptos que más brillaban eran otros), vengo soteniendo que lo que necesitamos es un serio replanteamiento del marco jurídico y político español. Muy a fondo, sería largo de explicar. Por eso, estoy muy de acuerdo con Monsalvo, un excelente comentarista a que sigo muy de cerca, pero aquí comete un serio desliz: emprenderla con los funcionarios y, más en concreto, con los de educación (lo que sorprende en alguien que me parece que es profesor). Ese empeño de deminizar y uniformar a los funcionarios es tan irracional como el de ciertas feministas en demonizar y uniformar a los hombres.

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    1. En ésto estoy con Monsalvo. El estatuto del funcionariado tiene tantos incentivos para el abuso y la corrupción que es mas prudente, desde un pesimismo epistemológico razonable, limitar su número al mínimo. Y hablo por experiencia

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  5. Para mí, esto es un camino muy trillado (la comparación entre el sector público y el privado la he debatido en multitud de ocasiones), e incluso recuerdo haber tenido contigo un interesante intercambio de comentarios acerca del asunto de los funcionarios. Nadie bien informado y bienintecionado negaría la aberrante dificultad que existe para sancionar al funcionario que incumple sus obligaciones, pero yo también tengo experiencia y te puedo decir que esto es más por incurias y comodidades entre los potenciales sancionadores que por inexistencia de normas obligativas. En paralelo, habla con gente que trabaje en el sector privado, y verás la de casos que te cuentan de verdaderos sinvergüenzas o gandules a los que es imposible meterles mano; esto es algo de lo que se habla poco, pero puede estar a un nivel igual o superior al del sector público. Habrás visto, seguro, el problemón que tenemos ahora con las "bajas" laborales, y no afecta solo a los funcionarios ni de coña. Un peaje del Estado de derecho: algunos abusan de los derechos y bastantes salen impunes. Ahora se habla de hipertrofia del sector público, pero, para pronunciarme con seguridad, tendría que saber a qué nivel estamos hoy en el contexto europeo (solíamos estar un pelín por debajo de la media) y saber a qué se dedican los funcionarios que hay: bienvenidos los policías, los médicos, los profesores o los gestores de la hacienda pública, pero yo no dejaría ni un funcionario de Igualdad. Antes de pronunciarse, hay que conocer el mapa, saber cuántos funcionarios hay y a qué se dedican y no llamar funcionarios, por favor, a asesores, chupópteros, Jésicas, parlamentarios y consejeros de gobiernos autonómicos que yo suprimiría, defensores del pueblo (nacionales y no digamos ya autonómicos) o ministros de Infancia y hasta de Cultura, porque llamar funcionarios a esos, aunque se les pague con dinero de todos y algunos hasta lo sean, es trampa. Habrá por ahí capullos que te digan que Broncano o la Inchaurrondo son funcionarios, ya te vale.
    Yendo ahora a Óscar Monsalvo, un columnista relativamente joven y al que considero dueño de un gran talento. Te dije antes que debe de ser profesor porque en algunos de sus artículos se ha pronunciado sobre temas de educación con el tino y el conocimiento que solo puede tener alguien que está dentro del oficio, así que me parecen inexplicables estas palabras: "Hablamos de periodistas orgánicos, pero no hay que olvidarse de todos esos profesores dependientes del ministerio que aprovecharán estos días para transmitir a sus pobres alumnos que la derecha está preparando un golpe de Estado". Demuestran una fobia al colega funcionario que no me esperaba en este brillante periodista, porque me la he encontrado solo en profesores de la privada resentidos y frustrados porque, en el fondo, lo que les pasa es que han querido entrar en la pública y no han sido capaces de superar ese pequeño escollo selectivo llamado oposiciones. Son, pues, innadmisibles, una falta de respeto y un insulto. Desde luego, en los centros públicos los profesores (he conocido a miles) no nos dedicamos a esas labores de proselitismo, no sé qué harán en otros. Puede que haya algunos que lo hagan, pero esa contingencia no le permite a Monsalvo lanzar esa insidia que deja una mancha de sospecha sobre todos. También hay en cierto tipo de centros profesores que hacen cosas muy feas con los niños (uno de ellos está dando mucho que hablar últimamente: https://okdiario.com/sucesos/nueva-nina-denuncia-agresion-sexual-cura-del-colegio-highlands-caso-ya-suma-ocho-victimas-14860659), ¿cómo le sentaría al señor Monsalvo que, aprovechando esto, alguien escribiese una frase como esta?: "Pero no hay que olvidarse de todos esos profesores de ciertas empresas educativas que aprovecharán estos días para follarse a sus pobres alumnos". Cuidado con las afirmaciones ladinas e insidiosas destinadas a criminalizar a todo un colectivo por las faltas de cuatro, porque son terriblemente injustas y nada constructivas.

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  6. No logra convencerme. Mi experiencia es que en el sector privado, esos abusos se acaban corrigiendo finalmente, aunque no con la celeridad que sería necesaria. En la pequeña empresa son prácticamente imposibles; el ojo del amo guarda la viña. el la grande, ya están los sindicatos de trabajadores para proteger a los gandules y vivales.
    En otro orden de cosas, he de decirle que si en su momento no me convencía su tesis del pucherazo en las últimas elecciones generales, las últimas noticias de las hazañas, y empleos públicos, de doña Leire, las confirman por completo.
    Hubo pucherazo y se usó el voto por correo para ello. Tenía usted mas razón que un santo.

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  7. Era difícil que estuviésemos de acuerdo en lo del sector público y el privado, pero doy por bueno que al menos ambos veamos que tampoco este último es el Paraíso Terrenal. Lo del pucherazo lo tuve claro el 29 de mayo de 2023, es decir, el día después de las autonómicas en las que el PSOE recibió un serio revolcón: si Sánchez decretó que las generales serían un día que favoreciese el ascenso del voto por correo, es que pensaba utilizarlo para dar un pucherazo. Con Sánchez, solo se acierta si uno se pone en lo peor.

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  8. Que el déspota desaforado de la Moncloa no tiene límites ni escrúpulos es un hecho probado. Como que concibe la política como una guerra, en la que tiene que destruir todo lo que le estorbe en su conquista, mantenimiento y expansión de su poder. Y que esa contienda será una guerra sucia. Son muchos los analistas y comentaristas que comparan a este autócrata con el protagonista de Al final de la escapada. Las cosas se le complican cada vez más, por lo que este descerebrado es, por tanto, más peligroso. Porque intentará morir matando e igual que ha convertido su partido en un mero negociado personal a su servicio, intentará destruir todas las instituciones (parlamento, tribunales de justicia, la Corona -si le estorba en algún momento-, la administración) con tal de ostentar un poder sin contrapesos. No recordaba la curiosa iniciativa de la tal Aina Calvo, que junto con Armengol, eran dos ruinas arrasadas por los tsunamis electorales que devastaron al PSOE mallorquín, encamado con pancatalanistas rupturistas y enloquecidos. Y, finalmente, la sombra del pucherazo electoral siempre sobrevoló en el ambiente. Demasiados indicios, demasiadas pistas, demasiados antecedentes. El círculo de las sospechas se va cerrando sobre Sánchez y su entorno y todo aparece más sórdido e inquietante. A la vez que zafio y cutre. O el sistema democrático acaba con este caudillo engreído o este pelanas acaba con el sistema democrático.

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  9. Va lanzado contra él como un meteoro y ya lleva mucha zapa hecha, esperemos que no pueda concluirla. Cuando podamos hacer el auténtico balance de daños del sanchismo, se nos van a poner los pelos de punta.

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