Libros que he publicado

-LA ESCUELA INSUSTANCIAL. Sobre la urgente necesidad de derogar la LOMLOE. -EL CAZADOR EMBOSCADO. Novela. ¿Es posible reinsertar a un violador asesino? -EL VIENTO DEL OLVIDO. Una historia real sobre dos asesinados en la retaguardia republicana. -JUNTA FINAL. Un relato breve que disecciona el mercadeo de las juntas de evaluación (ACCESO GRATUITO EN LA COLUMNA DE LA DERECHA). -CRÓNICAS DE LAS TINIEBLAS. Tres novelas breves de terror. -LO QUE ESTAMOS CONSTRUYENDO. Conflictividad, vaciado de contenidos y otros males de la enseñanza actual. -EL MOLINO DE LA BARBOLLA. Novela juvenil. Una historia de terror en un marco rural. -LA REPÚBLICA MEJOR. Para que no olvidemos a los cientos de jóvenes a los que destrozó la mili. -EL ÁNGULO OSCURO. Novela juvenil. Dos chicos investigan la muerte de una compañera de instituto. PULSANDO LAS CUBIERTAS (en la columna de la derecha), se accede a información más amplia. Si os interesan, mandadme un correo a esta dirección:
repmejor@gmail.com

Tenéis información de los precios aquí:

jueves, 31 de octubre de 2013

Con todos los honores: No, woman, no drive

 Para que se sepa que la lamentable discriminación de la mujer en el mundo islámico no es compartida por todos los hombres musulmanes, el joven Hisham Fageeh ha lanzado al mundo esta genial versión del "No, woman, no cry" de Bob Marley:
 
 
   Aunque ya es archiconocido, lo inserto aquí con todos los honores. Mis felicitaciones, Hisham.


martes, 29 de octubre de 2013

rEDUvolution: ¿el nuevo disfraz del fracasado pedagogismo?

   Estaba yo leyendo el ABC, cuando me encuentro con esta frase: "No existe trastorno de déficit de atención, solo niños aburridos". Como me parece muy sensato este ataque al hipertrofiado timo de la hiperactividad, pincho en la frase y llego a una entrevista a María Acaso, autora de un libro titulado "rEDUvolution", una nueva propuesta de revolución educativa. La señora Acaso dice cosas con las que estoy de acuerdo y otras con las que no, pero hay una serie de factores que me hacen sospechar que nos hallamos ante una formulación más del pedagogismo estilo Movimientos de Renovación Pedagógica, o sea, ante una revolución que, como tantas otras en la historia, ya está hecha y fracasada, así que nos ha favorecido ya con su particular aporte de calamidades, muy en concreto, una: la LOGSE. De entre las cosas de la entrevista que me hacen desconfiar, citaré un cierto tono entre buenista y mesiánico, esa inevitable idolatría del pedagogismo hacia las nuevas tecnologías, la vieja y catastrófica propuesta de poner al profesor a la altura del alumno, la absoluta inconcreción al hablar de programas educativos y su consiguiente desprecio por los contenidos.
   Una revolución nada revolucionaria, de penosos resultados y ya bastante vista, insisto, que se divulga por vías como un libro publicado en una de las máscaras del grupo Planeta o la Fundación Telefónica, organizaciones descamisadas donde las haya en el mundo de hoy. Termino: lo que realmente me ha dejado perplejo de la entrevista ha sido la respuesta que ha dado la autora del libro cuando le han preguntado por el papel del profesor en la nueva pedagogía; reproduzco sus palabras:
   Su papel debe entenderse como un productor cultural, como un artista. Debe saber coger conceptos y remixearlos, entendiendo como remixear el sistema de producción contemporánea. Eso no es copiar. Es relacionar. Y crear tu "playlist" de la clase.
   ¿Qué jerigonza es esta? Y otra cosa que me pregunto: ¿cuántas clases habrá dado realmente la señora Acaso? Algo me hace pensar que no muchas, como a menudo he visto en multitud de grandes innovadores, consejeros y revolucionarios de la educación que en el mundo han sido.

domingo, 27 de octubre de 2013

La AVT, el PP y UPyD no tienen derecho a manipular a las víctimas

   Para entender bien este artículo evitándonos precisiones que lo alargarían innecesariamente, no vendría mal que le echaseis un vistazo al que sobre la doctrina Parot hace en El bisturí mi amigo Paco, por dos razones: su excelente relato y valoración de la historia de este asunto y un comentario mío donde aporto algunos elementos más acerca del tema.
   No es necesario explicar que, hace unos días, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos emitió un fallo que consideraba no ajustada a derecho la doctrina Parot, la cual en su día sirvió para que, tratando de enmendar las aberraciones propiciadas por el código penal de 1973 (o sea, el último de la época franquista), quedaran con penas irrisorias crímenes tremendos. Descendiendo a los hechos concretos, se trataba de evitar la impunidad, sobre todo, de un buen puñado de terroristas, pero también de un número menor de violadores o violadores asesinos auténticamente repugnantes y que no hay que echar en olvido. Aunque la inmensa mayoría de los españoles seamos personas de bien a quienes nos indignaban esos crímenes, los que tenemos los pies en el suelo éramos conscientes de que la doctrina Parot, basada esencialmente en la aplicación retroactiva de las leyes, tenía pocas perspectivas de viabilidad en un estado que pretendiese ser de derecho e inserto en una Europa democrática: el problema real, repito, eran los errores de una legislación anterior, cosa complicada de arreglar.
   Sucedió el hecho de que la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) recibió esta sentencia con una reacción histérica y desmesurada, propiciada en gran parte por la personalidad de su presidenta, Ángeles Pedraza, una mujer a la que, a todas luces, le viene grande la alta influencia emocional de que está cargada la AVT, y lo digo simplemente porque esta señora, desde entonces, ha tenido en varias ocasiones el desparpajo de decir (nada menos) que el Estado español debe incumplir esta sentencia: ¿quién es Ángeles Pedraza para decretar tal enormidad, que sacaría a España de los círculos de la credibilidad democrática? Como ya se ha dicho muchas veces, las víctimas de todo tipo de crímenes, incluidos los terroristas, tienen derecho a la mayor consideración, pero eso no da a quienes se hallan el la cúspide de las asociaciones de víctimas la prerrogativa de manipular su muy respetable memoria en beneficio de sus intereses personales o de sus particulares visiones políticas.
   Y de eso se trata: de la manipulación de la memoria de las víctimas, porque hoy Madrid ha sido escenario de una lamentable ceremonia de tan execrable acto, en la cual han participado el PP (estaba y se le esperaba) y UPyD (con una penosa actitud carroñera, porque, como de hecho está sucediendo, sabía que los guantazos se los iba a llevar todos el oficiante mayor, o sea, el PP).  El espectáculo ha sido lamentable. El TEDH no ha fallado contra las víctimas, sino, como es su obligación y debemos agradecerle aunque esta vez nos contrarie, a favor de esos derechos humanos por los que debe velar. Aclarar esta diferencia es algo en lo que el Gobierno y el PP (y UPyD) deberían haberse aplicado, pero, demagógicamente, han elegido agregarse a una ceremonia de la confusión, cosa que no es buena para España y no creo que beneficie a la dignidad de las víctimas ni a su  memoria, como pretende UPyD.
   Hoy, en "El País", alguien señalaba muy acertadamente que para los beneficiarios de esta sentencia no representa demasiada gloria volver al País Vasco en el mismo tren que un violador; otra cosa que también se ha señalado ya a menudo es que la AVT, por sus consignas, con demasiada frecuencia, más que una asociación de víctimas, parece una organización política de ultraderecha, como le he oído a Pernando Barrena, y no es bueno que el aberchalismo demuestre en nada más clarividencia que el PP o UPyD. ¿Qué hacían representantes electos de este partido en la concentración de hoy? ¿Méritos electorales? ¿Para ganar qué votos? ¿Aclarará alguna vez UPyD cuál es su fondo ideológico o nos bastará con guiarnos por sus hechos? ¿Qué hacían gobernantes del PP como Ignacio González o Ana Botella protestando contra una decisión del TEDH? Demagogia y un flaco servicio a España, a la que ya ridiculizaron con lo de los JJOO y ahora ponen en una evidencia mucho peor con esto. Sus cargos conllevan representación institucional y de los ciudadanos en su totalidad, lo cual es muy serio: si no entienden esto, que se vayan. ¿Qué hacía Esperanza Aguirre? Lo suyo, enredar: "Esa sentencia es infame porque no tiene crédito y es algo vil", dice la que durante ha años ha presidido la Comunidad de Madrid, Dios nos valga. ¿Qué hacían, aparte de sembrar confusión, Floriano, Arenas y González Pons, que pretendió arrastrar al PSOE a este gran error político? ¿Os imagináis a los dos partidos que han gobernado y pueden gobernar España juntitos en una manifestación contra una sentencia del TEDH? ¿Qué imagen habríamos dado en el mundo? Lo único que nos faltaba. Cuando pienso que el PP puede volver a gobernar, me dan escalofríos. 

viernes, 25 de octubre de 2013

25 - X - 2013

   1. Balance sucinto
   Pasó la huelga general del día 24 y llegó el 25: ¿qué hay de nuevo, viejo? Retomando uno de los argumentos de mi artículo de hace unos días, no se aprecian diferencias entre el día 23 y el 25, luego parece que no es ningún sacrilegio decir que esta movilización ha sido un brindis al sol, otro más, porque no es ocioso recordar que, con parecidos planteamientos a la de ayer, ya tuvimos huelgas generales de la educación en mayo de 2013 y en mayo de 2012: es de puro cachondeo: lo que se dijo de aquellas convocatorias y lo que se está diciendo de la de ayer (ya veremos en qué queda esa tibia invitación al diálogo) es tan similar que las noticias parecen la misma, pero con distintas fechas. Y me paro aquí, porque sería de auténtico vértigo bucear en la desmesurada cantidad de huelgas inútiles (generales o no) de uno, dos o tres días que hemos tenido en la enseñanza en los últimos 25 años, lo que me lleva de nuevo a reafirmarme en cosas ya dichas, a saber:
   -No han traído, ni de lejos, ninguna mejora para el profesorado, y sí los inexcusables descuentos. Son, pues, una prolongada tomadura de pelo al colectivo, que solo ha servido para debilitarnos y que los sindicatos cubrieran el expediente y vivieran muy cómodos (y, durante lustros, muy requetebién).
   -Resulta una desproporción llamar a estas cosas huelgas generales, y no lo digo por mero perfeccionismo terminológico, lo digo porque esa imprecisión terminológica también es un fraude: convocas a una huelga general y la gente piensa que va a algo importante, con envergadura, eficaz, capaz de cambiar las cosas... y luego, ¿qué?: Un diita sin clase, una "mani" a las 18:30, y, hale, hasta la próxima "huelga general".
   -Resulta evidente que esta estrategia no funciona: ¿por qué el profesorado sigue secundándola? ¿Qué cuentas rinden quienes llevan años impulsándola? ¿Vamos a seguir eternamente realizando las mismas acciones rutinarias e inútiles o vamos a pararnos algún día a pensar en lo que nos conviene?
2. Eso, eso: ¿qué es lo que nos conviene?
   Doña Monserrat Gomendio, secretaria de estado de Educación, ha venido en estos día realizando declaraciones interesantes. Dijo primero que el actual sistema educativo es insostenible (avalándolo con cifras de todos conocidas): es algo en lo que estoy absolutamente de acuerdo, otra cosa es que la LOMCE sea un recambio aceptable. Dijo después que convocar contra la LOMCE sin añadir una alternativa es como convocar a favor de lo que hay, es decir, de eso que es insostenible: esto tan cabal (y lo anterior) ya lo dije yo en mi artículo del otro día, señora Gomendio, ¿es que lee usted La garita del guachimán? Por último, hoy ha dicho algo puramente en la línea de derechona de su partido:  ha acusado a los huelguistas de protestar no por razones relacionadas con la reforma educativa, sino con las mejoras salariales, la reducción de carga lectiva y la del número de alumnos por clase. Tenemos que reconocer que esta señora sabe por dónde se anda. Además, esta última manifestación hay que analizarla a fondo, porque es muy interesante.
   En primer lugar, la señora Gomendio ha visto muy bien que esta huelga tiene dos reclamos absolutamente heterogéneos: el no a la LOMCE y la cuestión profesional: salarios, horarios, alumnos: insisto: ¿leerá esta señora La garita del guachimán? Y sabe muy bien que el primero es político y afecta a la guerra política PSOE-LO(GS)E vs. PP-LOMCE, mientras que el otro es profesional (pero muy relacionado con la calidad de la enseñanza, que no lo pierda de vista) y es el chantaje, señuelo o caramelito con que los defensores de la LO(GS)E han atraído al profesorado como fuerza de choque para sus guerras. ¡Por supuesto que sí, señora Gomendio!: hay una importante reivindicación profesional pendiente con el profesorado, justamente esa que usted señala, y tenga por seguro que este guachimán, de haber sido solo esa la reivindicación, hoy habría hecho huelga, pero, claro, el búnker logsiano, que tiene secuestrada a la educación, no va a malgastar su poder de convocatoria en tonterías, lo va a utilizar para defender lo suyo, o sea, la LO(GS)E. En segundo lugar, es verdad también que la señora Gomendio se ha puesto en evidencia con esas palabras: parece querer decir que está mal que un colectivo de profesionales defienda sus derechos, incluso después de los tremendos abusos de que ha sido víctima, pero, bueno, es un lapsus comprensible: la secretaria de estado de Educación es del PP. De todos modos, insisto: sabe muy bien lo que nos interesa a los docentes: salarios, horarios, número de alumnos: los tres elementos en que su partido nos ha estado haciendo en los últimos dos años un daño terrible a los docentes y a la enseñanza. Sí, señora: esto es lo que nos conviene. Lo otro, lo de la LO(GS)E y la LOMCE, dos malas leyes de dos malos partidos, es cosa de ellos y de sus satélites. Mientras convoquen por eso, el guachimán no va, a ver si algunos dejan algún día de intoxicarnos con sus manipulaciones. 
3. Pero ¿de verdad se está defendiendo la enseñanza pública?
   Una última observación: los actuales conflictos educativos se presentan como una defensa de la enseñanza pública y no dudo que sea esta la intención de los convocantes de acciones y sus seguidores, ahora bien, me gustaría dejar algunas reflexiones. El fracaso del sistema logsiano está demostrado por un aluvión de hechos que sería tedioso repetir: ¿de verdad es defender la enseñanza pública el negarse encarnizadamente a que sea objeto de la menor modificación? Hay un pecado que alcanza por igual al PP y al PSOE y sus respectivos aliados: la falta de voluntad de acuerdo: ¿de verdad es defender la enseñanza pública el no haber hecho aún auténticos esfuerzos por acordar una ley de amplio consenso? Las organizaciones que pintan en la educación llevan tres huelgas generales contra la LOMCE en un año, que son fruto de una política (por llamarla de algún modo) caótica, sin rumbo, ineficaz, sectaria e histérica: ¿de verdad es esto defender la enseñanza pública? ¿De verdad es defender la enseñanza pública que el Sindicato de Estudiantes saque de las aulas a los alumnos durante tres días seguidos, más los que vengan? ¿De verdad es defender la enseñanza pública que estos muchachitos (algunos, no tanto) aprendices de brujo tengan la potestad de mandar periódicamente al parque a chicos de doce, trece o catorce años? ¿De verdad es defender la enseñanza pública que salga en los medios una portavoz de un sindicato profesoral felicitándose por el 90% de seguimiento de la huelga de alumnos? ¿De verdad se creía esa señora que todos esos chicos estaban de huelga contra la LOMCE? Llevamos muchos años con esto: ¿seguro que no ha influido en el retroceso que en ellos ha experimentado la enseñanza pública?   



viernes, 18 de octubre de 2013

"La república mejor" en Acantilados de papel

   Hola, amigos. Hoy ha salido en "Acantilados de papel" una reseña que analiza "La república mejor". Aquí tenéis el enlace:

   La reseña la firma Lola Estal, a quien agradezco que haya tenido la amabilidad de elegir mi novela para publicar un comentario en la página. 

miércoles, 16 de octubre de 2013

Vasili Arkhipov

 
 
   A este guaperas de la foto, que se llamaba Vasili Arkhipov, es posible que le debamos usted y yo el estar vivos, y la humanidad, el seguir existiendo. Supe de su figura y de la crucial intervención suya que muy probablemente nos salvó hace unos días, viendo en La 2 un programa sobre la crisis de los misiles entre Estados Unidos y la U.R.S.S. de 1962.
   ¿Cuál fue esa intervención del señor Arkhipov? El 27 de octubre de 1962 (se van a cumplir dentro de nada cincuenta y un añitos), el submarino en que prestaba servicios fue acorralado por una docena de navíos estadounidenses, que lo hostigaron con cargas de profundidad. Ante esa situación, el capitán del submarino pretendió lanzar un torpedo nuclear, para lo cual debía contar con el consenso de otros oficiales, entre ellos, Arkhipov, que no solo fue el único que rompió el consenso, sino que, además, posteriormente, persuadió al capitán de que abandonase esa idea. De haberse lanzado ese torpedo, los norteamericanos habrían replicado y se habría iniciado el temido intercambio de bombazos nucleares, baile para el cual, por cierto, China habría quedado invitada, puesto que después se supo que entre los planes inmediatos de réplica americanos estaba un ataque al coloso asiático. Esto no ha sido lo único que se ha sabido mucho después: también se han conocido datos que ponían de manifiesto que el mundo estuvo realmente al borde del desastre nuclear.
   Como también más tarde se supo que los dos líderes envueltos en aquella crisis (J. F. Kennedy y Nikita Jrushchov), los cuales, aunque parezca otra cosa, hicieron enormes esfuerzos y concesiones para detenerla, se ganaron por su "blandura" la repulsa de los halcones de sus respectivos países. Lo que sí es de dominio público es que el norteamericano murió asesinado muy poco después y el soviético fue defenestrado. Aun con sus errores a cuestas, hoy se reconoce que en aquella ocasión lo que aportaron fue cordura.
   Como también la aportó Vasili Arkhipov, en un episodio apartado de la atención pública, pero tan definitivo como el que más. ¡Qué suerte tuvimos con que aquel día hubiera en el submarino soviético al menos un oficial templado y sensato! ¿Cuántas veces una catástrofe o una desgracia habrán sido evitadas por personas heroicas y anónimas como él? Y, mirado por el lado pesimista, ¿cuánto poder destructivo está en manos de personas como los otros oficiales, que estaban dispuestos a lanzar el bombazo? Mejor no saberlo, mejor pensar que, en el último momento, siempre aparecerá un Vasili Arkhipov. 

domingo, 13 de octubre de 2013

Compárese


           Banderas catalanas, españolas y europeas; uso del catalán y el castellano; llamamientos a la convivencia armónica de todos los catalanes sin exclusión en una Cataluña que es plural; ausencia de mensajes agresivos o amenazantes; invitaciones explícitas a que los violentos abandonasen la concentración. Y junto a esto una petición: “Queremos que nos gobiernen en estricta defensa del principio de legalidad y el cumplimiento de la Constitución. Queremos garantías de protección, puesto que el poder siempre tiende a la extralimitación”. Inquieta y avergüenza que en un país democrático se tengan que formular peticiones así. Compárese esto que se vio ayer en la plaza de Cataluña con la crispadora agresividad del discurso nacionalista, con su carácter segregador o con esas quemas de banderas que ya ni sorprenden y tendremos pocas dudas acerca de quién representa hoy un peligro para la convivencia en España.
           Los grandes pecados de los gobiernos democráticos españoles han sido muy a menudo por omisión: omisión en la vigilancia de los desmanes de la banca, omisión en el control de la corrupción política, omisión en la lucha contra los abusos urbanísticos, omisión del deber de protección del territorio y el medio ambiente… y omisión de respuesta ante las extralimitaciones del nacionalismo. Todas ellas las hemos pagado muy caras y la última ha tenido el resultado de que, un buen día, nos encontramos con que ciertos partidos habían incendiado Cataluña con sus exigencias de ruptura y amenazaban con arrastrarnos a una grave fractura social, perspectiva que a ellos parece no importarles. Durante años se les ha dejado sembrar el miedo, lo que les ha llevado a cometer el error de cálculo de que eran los amos absolutos. La manifestación de ayer parece demostrar que se está perdiendo el miedo y deja claro que, si fuera necesario, podría hacerse otra que multiplicara por diez sus asistentes, que nadie se engañe. ¿Hará falta llegar a eso para que algunos recapaciten? Esperemos que no sean tan necios.
           Y, para necios, los del PSC. Le decía Albert Rivera a este partido que, si sigue sin acudir a estas convocatorias,  los que lo harán serán sus votantes. Supongo que por prudencia y por elegancia, no ha añadido lo que todos pensamos: que después muchos de esos votantes irán fugándose hacia otras opciones, esto ya debería tenerlo muy claro el PSC, porque tiene experiencias no muy felices de ello, que le pregunten a Montilla. Como debería tener muy claro el PSOE que le urge romper con esa formación. Tal vez, si ya se hubiera decidido, ayer hubiera hecho lo que correspondía: no ya acudir a la concentración de la plaza de Cataluña, sino respaldarla. Seguro que la convocatoria habría ganado en participantes, el PSOE en credibilidad (de la que no anda sobrado) y el panorama político en clarificación.

jueves, 10 de octubre de 2013

Así no vamos a ninguna parte

   Empezaré por decir que me ha costado decidirme a escribir este artículo, porque, malintencionada o erróneamente,  alguien podría interpretarlo como un posicionamiento a favor de las políticas educativas del PP, sospecha de la que creo que me salva mi trayectoria (en lo referido solo a los planteamientos teóricos, puede comprobarse repasando los 98 artículos de la etiqueta "Educación" de la columna de la derecha). También me retrae el hecho de que sé que no va a gustarles a muchas personas a las que aprecio y que comparten bastantes de mis puntos de vista sobre la enseñanza, pero, aun con todo esto, me siento en la obligación de decir que estoy en absoluto desacuerdo con la huelga general en la educación convocada para el próximo día 24 y también con la línea que, desde hace al menos un año, está tomando la protesta educativa. Paso a exponer mis razones.
   1.- Los dos principales motivos que se esgrimen para convocar la movilización son los recortes en enseñanza y la promulgación de la LOMCE. Sucede, sin embargo, que son cosas muy distintas, como se demuestra por el solo hecho de que en Madrid o Valencia hemos sufrido y combatido recortes desde mucho antes de que se hablara de la LOMCE e independientemente de ella, o por la curiosa paradoja de que la Generalitat catalana, furibunda enemiga de la LOMCE, no parece hacer ascos a eso de recortar en educación. A la vista del empeño contra la LOMCE que están poniendo el PSOE, CCOO, UGT, la CEAPA o la propia Generalitat, la conclusión no puede ser más clara: el asunto de los recortes se está usando como anzuelo. Una vez más, estas organizaciones pretenden usar al profesorado como carne de cañón.
   2.- Convocar contra la LOMCE sin decir a continuación que se propone otra cosa (y sin explicar cuál), equivale a decir no a la LOMCE y sí a lo que hay, o sea, a la LOE hija de la LOGSE: aparte de sus beneficiarios y eternos defensores, que son justamente quienes están detrás de la huelga, ¿realmente cree alguien que estas leyes merecen la menor defensa? Estas leyes han hundido la enseñanza española, como ven y afirman muchas personas, no solo José Ignacio Wert. Muchos de los que estamos contra los desastres que ha impulsado el PP en la educación repudiamos también la LOGSE, cuyos beneficiarios no tienen el menor derecho a manipularnos y chantajearnos.
   3.- Deberíamos dejar ya de tergiversar el concepto de huelga, muy especialmente, el de huelga general. No se puede llamar huelga a una convocatoria de paros de dos días; no se puede llamar huelga general a un paro de un día, por mucho que a él esté convocado todo el colectivo. Llevamos más de 20 años con supuestas huelgas que no han conseguido más resultados que debilitar al profesorado y castigarlo con descuentos. ¿Piensa alguien que el día 25 de octubre vamos a estar mejor que el 23? Entonces, ¿para qué sirve una nueva caricatura de huelga general, a qué viene convocarla? Los responsables de esta estrategia de décadas han hecho mucho daño al profesorado, lo han dejado sin fuerza para la reivindicación colectiva y desdibujado, mientras ellos, en tiempos mejores, se beneficiaban de prebendas, subvenciones o control político. Miremos hacia atrás y veremos lo caro que lo hemos pagado.  
   4.- Me niego a respaldar la trivialización por la que desde hace tiempo se viene despeñando la protesta educativa, en la que proliferan actos y manifestaciones cada vez más carnavalescos y/o inútilmente testimoniales. Tanto globo, tanto gigante y cabezudo, tanta batucada, tanto "flashmob" surrealista, tanto aire festivo... van a conseguir (si no lo han conseguido ya, como los hechos parecen estar demostrando) que nuestras protestas no se tomen en serio, y de ahí a que tampoco se tome en serio ni a los profesores ni a su importantísima labor media un paso. El último capítulo de este grave dislate, lo ha protagonizado en el Congreso el diputado de Amaiur Xavier M. Errekondo con su payasada de los brazos en cruz. Viniendo de alguien de Amaiur, es indiscutible la intención de convertir en esperpento el parlamento español, que esta formación desprecia, esperpento que esta vez ha hecho extensivo a la educación, la cual no se merece tan penosos defensores / manipuladores.
   5.- A la hora de meterse en guerras, es crucial saber muy bien con qué aliados nos juntamos. De ningún modo iré a una huelga del bracete con gente como el señor Errekondo, cuya guerra es contra una ley que él descalifica por españolizadora y a favor de una secesión defendida hasta hace nada a tiro limpio; de ningún modo iré a una huelga con gente como la consejera catalana Irene Rigau, cínica responsable de casi mil millones de euros en recortes, que lo que pretende es perpetuar la segregación lingüística que el nacionalismo lleva años imponiendo en la enseñanza catalana y que ya ha anunciado que en Cataluña no se aplicará la ley: ¿qué clase de demócratas son estos que pisotean las leyes que no les gustan? ¿Con estos aliados "progresistas" defiende el PSOE sus posturas en educación?
   Concluyo. Viene muy a cuento el PSOE, porque lo que aquí se está queriendo defender y eternizar es la hegemonía de este partido y sus aliados en la enseñanza. Ya han anunciado que, cuando gobiernen, derogarán la LOMCE. Es curiosa la fijación del PSOE con las leyes educativas: lo primero que hizo Zapatero al llegar al poder fue derogar la LOCE, pero estuvo ocho años sin tocar las disposiciones urbanísticas del PP que impulsaron la catastrófica burbuja inmobiliaria. ¿Esto era política de izquierdas? ¿Pasará lo mismo en 2015 si la izquierda llega al poder? ¿Se cebarán con la educación pero se olvidarán de los restantes desmanes del PP?
   La enseñanza atraviesa hoy graves problemas. En lo referido a recortes y retrocesos salariales y profesionales, quienes tienen poder de convocatoria, que organicen un conflicto sola y exclusivamente con estas reivindicaciones, pero un conflicto de verdad, una huelga indefinida. A partir de marzo de 2014, se abre un periodo de sucesivas convocatorias electorales que podría brindar momentos oportunos. Y, en cuanto a las leyes educativas, lo único razonable sería un gran consenso, pero sobre bases educativas, no políticas, y que contase no solo con políticos y sindicalistas, sino con la sistemáticamente postergada voz de los profesores. Seré sincero: debería intentarse a toda costa, pero lo veo muy complicado, habida cuenta de quiénes nos gobiernan y de los móviles por los que actúan.

domingo, 6 de octubre de 2013

Las brujas de Zugarramurdi

   Hace algo menos de un año, me llevé un  buen rebote con Balada triste, la ya penúltima película de Álex de la Iglesia. Por fortuna, puedo decir que hoy, después de haber visto la última, o sea, Las brujas de Zugarramurdi, acabo de reconciliarme con el cineasta vasco, esencialmente por una razón: el jartón de reír que me  he pegado, casi sin parar durante toda la película. Como acostumbro a hacer cuando una película me gusta y la recomiendo, no voy a decir más, aunque esta tampoco es que tenga mucho que destripar. Eso sí, no estará de más que os recuerde que el humor de Álex de la Iglesia es gamberro, irreverente y a veces un tanto bestia: lo suyo no es la corrección política, y en esta película lo demuestra particularmente con lo referido a los planteamientos feministas.   

martes, 1 de octubre de 2013

Praxis educativa. 7: test para detectar equipos directivos nocivos

   Hablaba hace unos días con una amiga que es representante sindical y además buena conocedora del mundo de la enseñanza y acabamos coincidiendo en que muchos de los males que hoy aquejan a la vida de los centros tienen que ver con el comportamiento de los equipos directivos. Directivos buenos y malos los ha habido siempre, pero, en la actualidad, en gran parte gracias a que los procedimientos selectivos están pensados para que la Administración elija a las personas más acordes con sus intereses, los directores y los colaboradores de que se rodean se muestran cada vez más inclinados a vicios como el servilismo ante lo que viene de arriba, el clientelismo igualmente servil ante los padres, la permisividad ante los alumnos conflictivos o el menosprecio y despotismo hacia los profesores, por mencionar solo los más repulsivos y perniciosos para la enseñanza. ¿Padece usted un mal equipo directivo? El guachimán, en su empeño por ser útil al profesorado (y a los alumnos, y a los padres, porque, aunque intenten aparentar otra cosa, los malos directivos perjudican a todos), pone a su disposición el siguiente test con el que podrá comprobarlo.

 
Práctica
No
Los claustros de tu centro son “unidireccionales”: el profesorado apenas habla, porque está claro que lo que diga va a contar poco o nada.
Los claustros son rutinarios hasta en las convocatorias: como se habla siempre de lo mismo, parece cambiar solo la fecha.
Los claustros de análisis de resultados se reducen a una rutinaria presentación de porcentajes de aprobados o suspensos. No hay verdadero análisis ni debate.
Si algún profesor del claustro manifiesta discrepancias, el equipo directivo se siente atacado y responde mostrando disgusto o indignación.
El equipo directivo se ha servido de argucias para eludir debates preceptivos o incumplir decisiones del claustro que no le gustaban.
En tu centro se han dado casos de padres que han presentado pretensiones extralimitadas o han aparecido con modales incívicos y el equipo directivo no les ha puesto ningún límite o ha sido contemporizador.
En los conflictos entre padres y profesores, tu equipo directivo ha actuado desoyendo al profesorado.
Tu equipo directivo tiene tendencia a usar a los padres en abstracto como pretexto.
En los conflictos de todo tipo, parece claro que la principal preocupación de tu director es que los problemas no le salpiquen.
A tu equipo directivo lo que le interesa es cerrar los conflictos cuanto antes y sin ruido, aunque sea de manera totalmente injusta.
Tu equipo directivo tiende a restar importancia a las incidencias cuando el perjudicado es un profesor.
Cuando un profesor se ve envuelto en un conflicto, lo que hace el equipo directivo es intentar convencerle de que no es nada grave y de que lo deje estar.
En ocasiones o de forma habitual, el jefe de estudios ha puesto a la misma altura a un profesor y a un alumno con el que tenía un conflicto.
Los profesores de tu centro se sienten mal protegidos por el equipo directivo, o, simplemente, desprotegidos.
Existe la evidencia de que quienes incumplen las normas gozan de cierta impunidad y hasta son tratados con simpatía en jefatura de estudios.
El sistema de sanciones de tu centro es inexistente, de aplicación irregular y arbitraria, ineficaz o completamente inútil.
Tu equipo directivo parece contar con que, por parte del profesorado,  el acatamiento es la única respuesta posible ante cualquier medida, aunque sea injusta, inadecuada o discutible.
Tu equipo directivo está más preocupado por el porcentaje de aprobados que por el nivel real de los aprendizajes. Lo que pretende es un alto porcentaje de aprobados, aunque sean inmerecidos.
Tu equipo directivo presiona a los profesores que considera que suspenden mucho, sin pararse a considerar las causas.
Tu director incumple o intenta incumplir las normas que por alguna razón no le convienen.
Tu director ha intentado alguna vez hacer pasar como obligadas por la ley cosas que no lo eran.
En tu centro, a los profesores o a parte de ellos, se les tiene marcados, es decir, se les amenaza o se les llama la atención por cosas insignificantes o incluso a algunos se les tiene discriminados.
En tu centro existe una capillita de incondicionales del director que no tiene reparos, si llega el caso, en defenderle de forma agresiva.
La capillita de amigos del director tiene privilegios en cosas como horarios, cargos, trato, atención a peticiones o defensa en casos de conflicto.
Puede darse el caso de que algún miembro de la capillita se esté saltando alguna obligación profesional, con respuesta permisiva por parte del equipo directivo.
En tu centro, las celebraciones de carácter general (tipo cena de Navidad) no se   realizan, o los asistentes han quedado reducidos a la capillita de amigos del director más algún que otro despistado.
En tu sala de profesores, no es prudente hablar de los problemas del centro.
En tu sala de profesores, criticar al equipo directivo (aunque sea de forma moderada) puede acabar acarreándote problemas.

   En total, 28 cuestiones, 28 prácticas nada aconsejables en un equipo directivo como es debido. Supongo que podría haber incluido alguna más, pero tampoco hay que pasarse, a fin de cuentas, La garita del guachimán es solo un blog. ¿Has hecho el test? ¿Te salen muchas respuestas afirmativas? Pues, en ese caso, cuidadito con tu equipo directivo.